Sin límites: denunciaron a un docente de La Plata por alzar a sus alumnas

Una escuela de la localidad de Lisandro Olmos quedó envuelta en un escándalo de proporciones por las conductas reprochables de un docente, al que denunciaron por comportamientos inapropiados en el ejercicio de su actividad profesional.

La presentación en sede policial habla de contacto físico fuera de lugar entre el educador y un grupo de alumnas de segundo año. Por ahora, siendo todo tan reciente, no existe un correlato judicial, aunque de las actuaciones se dará traslado a la fiscalía en turno para que deslinde las responsabilidades del caso.

El acusado, que enseña una materia del área de las Ciencias Naturales, trabaja en un colegio situado no muy lejos de la sede de la comisaría decimoquinta, la misma en la que lo señalaron como autor de conductas que nada tienen que ver con su tarea en el aula.

¿Qué dice la exposición de los padres de una de esas estudiantes? Que les hacía upa, les daba abrazos, les acariciaba el pelo y que hasta les hacía las trenzas, con la excusa de que él, como tiene el cabello largo, estaba acostumbrado, según indicaron a este diario voceros del caso.

También destacaron que, teniendo en su poder los contactos de los teléfonos celulares, bajo el ardid de que les tenía afecto, buscaba pretextos para entablar una amistad online con ellas a través de juegos y otras situaciones extrañas.

Al parecer, de acuerdo a las mismas fuentes, en la intimidad de su hogar, una de las alumnas se quebró y le contó a los padres lo que sucedía en el aula. “Estaba muy angustiada”, señalaron.

Al día siguiente, tan extrañados como indignados, esos padres decidieron apersonarse en el establecimiento educativo para pedir explicaciones y se enteraron de que el director estaba de licencia médica.

Por eso los atendió una preceptora, quien anotó palabra por palabra lo que le dijeron y elaboró un acta a mano alzada.

En base a la información a la que accedió EL DIA, este tema estalló a fines de junio, cuando la escuela recibió la primera advertencia de lo que estaba pasando con ese profesor, aunque recién escaló al presentarse más padres en la institución para narrar episodios de similar cariz.

Incluso uno refirió que, según su hija, el docente “las alzaba en la clase, las apoyaba en sus piernas, les hacía peinados y les pedía que se lo hicieran a él y las abrazaba por la espalda”.

Con los varones, por su parte, en medio de la gran preocupación que existe por las apuestas virtuales, “hacía juegos en red, fomentando ese tipo de comportamientos viciosos”.

De todo esto, se indicó, se impuso al Gabinete de Orientación Escolar y a los funcionarios de la Dirección de Escuelas bonaerense, a través de la inspectora responsable, que optaron por comunicarse con el docente para una entrevista.

Dicen que le enviaron dos citaciones vía mail, aunque no habría acusado recibo y que se presentó a trabajar, el 10 de julio pasado, pese a que la decisión de la superioridad era tratar la cuestión, entrevistarse con el acusado y definir las acciones a tomar a través de un sumario interno.

Justo esa jornada, en medio de la ola polar, se decidió que los alumnos ingresaran más tarde, por lo que se sorprendió al no ver a nadie.

Enterado de esa novedad y de la otra, la que lo señalaba por esas actitudes inadecuadas, no tuvo más remedio que retirarse del establecimiento.

Abrazos, juegos, peinados y llamados, serían las conductas reprochables del docente en Olmos

Cabe destacar que, al regreso de la licencia, el director del colegio se involucró en la cuestión y se puso a disposición de los interesados para llevarles tranquilidad.

EL ANTECEDENTE

Meses atrás, en Colonia Urquiza, otro profesor quedó en la mira por una serie de presuntos ataques sexuales en perjuicio de una alumna.

El cambio conductual que en 2023 experimentó una menor que vive con sus padres y dos hermanas en Melchor Romero, fue la primera señal de alarma.

Se mostraba muy irascible en la casa y no quería ir a la escuela. Además atravesaba pasajes de angustia, se aislaba y prefería no salir a ningún lado.

La madre, observadora, al principio pensó que podía tratarse de la preadolescencia, ya que a los 11 años una persona suele tener este tipo de fluctuaciones emocionales. Sin embargo, la realidad era otra y muy grave.

La joven asistía a la Escuela Secundaria Nº 86, en las calles 492 y 186, desde donde llegaron a llamar a la mujer para preguntarle por su hija, ya que no apareció varias veces por el aula.

Extrañada, porque la veía prepararse para el colegio, se enteró de algo terrible.

Corría el mes de enero de este año cuando en la familia “cayó la ficha”, que sirvió para armar el rompecabezas y tener perfecta lectura de cuál era el escenario.

En medio de una crisis, la nena contó que era blanco de presuntos abusos por parte de un profesor.

“No solo abusaba de mi, también me decía que me iba a matar”, le dijo a la madre y a las hermanas, que son mucho más grandes que ella.

Ahí se hizo un silencio, hubo shock y múltiples interrogantes. ¿La nena entendía bien qué era abuso y que podía parecerlo? Pese a todo, casi de rodillas, les suplicó, les imploró, que no denunciaran nada, porque tenía terror.

“Si hacés la denuncia, será peor. Soy comisario, soy policía y te voy a encontrar en cualquier lado”, le habría dicho el docente a la alumna, de acuerdo a lo que la madre expuso en el Gabinete de Delitos Sexuales de la DDI La Plata, en 1 y 59.

La joven habló de tocamientos en sus partes íntimas y que “le había metido el coso en la vagina”, siempre en base a lo que surge de la presentación oficial.

Cuando le preguntaron si el hombre se había colocado un preservativo, ella mencionó no saberlo.

Al parecer, para consumar esos aberrantes encuentros, llevaba a la chica a un salón contiguo al aula donde le daba clases.

Por lo general, muchas de esas situaciones habrían ocurrido cuando otros docentes la mandaban a buscar material didáctico o fotocopias al salón donde se encontraba el profesor, que se aprovechaba de esa circunstancia, la tomaba de un brazo y, por la fuerza, la llevaba al sector donde presuntamente la violaba, expresó la madre en su exposición.

Según fuentes judiciales, esta causa está en pleno trámite investigativo, ante la UFI Nº 7 de La Plata, que pidió una serie de informes médicos para conocer la entidad de los dichos de la adolescente y saber si fabula.