El delito siempre está ocupado en la Ciudad
Edición Impresa | 26 de Septiembre de 2024 | 02:00

El recurso del efecto sorpresa, acompañado por una combinación de insultos, gritos, órdenes y herramientas devenidas en armas blancas, resultaron suficientes para tomar el control de un establecimiento de telefonía, que está situado en la intersección de las calles 7 y 48, en pleno corazón de La Plata, de donde huyeron con un botín valuado en varios miles de pesos.
De este modo, en un santiamén, dispositivos accesorios, teléfonos móviles y la escasa cantidad de efectivo presente en la caja registradora, pasaron a manos de dos sujetos, que se presentaron en el lugar con los rostros totalmente cubiertos.
En ese marco, la identidad de los responsables del hecho seguía siendo desconocida para las autoridades hasta la hora del cierre de este reporte. Se sabe que entraron en el local alrededor de las 19 horas, justo cuando la actividad comercial comenzaba a mermar. Respecto al asalto, ambos individuos se dirigieron directamente al mostrador y empezaron a hostigar a los dos empleados presentes en ese momento.
“¡Al fondo! Andate al fondo”, “No nos mires a los ojos” y “Baja la vista o te liquido”, fueron algunas de las instrucciones, que lanzaron apenas entraron en contacto con los trabajadores de la tienda.
Armados con destornilladores, avanzaron hacia el otro lado del mostrador dejando a los empleados sin posibilidad de escape.
Así, afligidos por el temor a resultar heridos, no tuvieron más alternativa que obedecer y dirigirse hacia el baño.
Como se mencionó, el ataque se ejecutó de manera inmediata. Por lo general, los ladrones que asaltan establecimientos comerciales suelen, en primera instancia, simular ser clientes. Esta etapa les facilita a los criminales definir distintas variables antes de llevar a cabo el asalto. A través de la observación, pueden determinar el número de personas en el local, posibles rutas de escape, la ubicación de alarmas y cámaras, así como el funcionamiento de la caja registradora.
En este caso, los delincuentes obviaron este protocolo delincuencial y optaron por la urgencia y la improvisación.
Por lo tanto, los pesquisas hablan de un robo al voleo, aunque no descartan la posibilidad de que la banda haya concebido un plan básico tras alguna forma de vigilancia previa en el lugar o luego de recibir información detallada de algún cómplice.
Fuentes confiaron que “las autoridades esperan poder corroborar o descartar esta hipótesis en las próximas horas, una vez que hayan concluido el análisis de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la zona”.
Según la denuncia presentada por los representantes del negocio, los delincuentes se llevaron una computadora portátil de la marca Note, varios auriculares inalámbricos, repuestos para celulares y tres teléfonos móviles.
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