VIDEO. “La peor escuela”: un hombre salió a robar en La Plata con su hijo menor de edad

Forzó la puerta de un edificio en 58 entre 2 y 3 para llegar al estacionamiento, donde el chico agarró la bici de un estudiante brasileño de Medicina. ¿Cuentan agravantes para el adulto?

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Un adulto quedó filmado cometiendo un delito junto a un menor de edad, que se presume sería su hijo. El caso, que generó un fuerte repudio en la Ciudad, ocurrió de madrugada en un edificio de la calle 58 entre 2 y 3, donde logró destrabar la puerta principal de acceso para ganar paso hacia el interior de la construcción y apoderarse de la bicicleta de un estudiante brasileño de la carrera de Medicina.

El hecho, constitutivo de la figura típica de robo, porque hubo violencia para vulnerar la entrada, disparó un interrogante entre los vecinos, muchos de los cuales se preguntaron si para el hombre no corresponde una pena mayor por haber involucrado o incitado a un chico a desplegar una conducta ilegal.

La respuesta está en el artículo 41 quater del Código Penal, que establece: “Cuando alguno de los delitos previstos en este Código sea cometido con la intervención de menores de dieciocho años de edad, la escala penal correspondiente se incrementará en un tercio del mínimo y del máximo, respecto de los mayores que hubieren participado en el mismo”.

Algo parecido ocurre con el caso de las drogas, penado en la Ley de Estupefacientes 23.737, cuyo artículo 11 reza: “Las penas previstas en los artículos precedentes serán aumentadas en un tercio del máximo a la mitad del mínimo, sin que las mismas puedan exceder el máximo legal de la especie de pena de que se trate: a) Si los hechos se cometieren en perjuicio de mujeres embarazadas o de personas disminuidas psíquicamente, o sirviéndose de menores de dieciocho años o sin perjuicio de éstos (...); e) Cuando el delito se cometiere en las inmediaciones o en el interior de un establecimiento de enseñanza, centro asistencial, lugar de detención, institución deportiva, cultural o social o en sitios donde se realicen espectáculos o diversiones públicos o en otros lugares a los que escolares y estudiantes acudan para realizar actividades educativas, deportivas o sociales (...)”.

Igualmente, por el momento, no fueron ubicados por la Policía, al margen de que la propia víctima del robo sí lo hizo.

En un video, que subió a sus redes sociales, Joao relató: “Yo soy la víctima y quería comentarles un poco de mi situación actual. Mi medio de trabajo que era la bici y yo ya estaba por un par de meses sin trabajar, porque tuve un problema en la rodilla. Me hice una cirugía en enero estaba ahí recuperando y ahora recién volví a poder manejar la bici y volver a trabajar. Y capaz que dos semanas después que vuelvo me roban la bici acá adentro de mi edificio”.

En su relato, detalló: “Entran y roban la bici y eso es lo único que quería comentarles, porque y demuestro mi indignación por el la situación que está el país, cómo está la gente. Enseñar a un niño a venir a robar es algo deplorable”.

Lo curioso del caso fue que el brasileño se cruzó con los ladrones en el centro y los encaró, haciéndole saber al más grande lo que había hecho y que lo tenía registrado en imágenes. Incluso llevaban consigo su rodado.

Igualmente, el hombre se desentendió de la situación y siguió camino, mientras que los llamados al 911 que habría efectuado el damnificado no dieron los resultados deseados.

 

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