Susana, ¿Traiciona a Telefé y se muda al Trece?

Por estos días, los pasillos de la televisión abierta se convirtieron en un hervidero de rumores. En el centro de la escena, como en tantas otras veces, está ella: Susana Giménez, la diva de los teléfonos. ¿Volverá a la pantalla chica? ¿Y si lo hace… será en Telefé o se muda a El Trece?
El rumor comenzó como una versión menor, pero creció con velocidad de fuego: “Susana Giménez podría pasar a El Trece”, dijeron, y se armó. Aunque no había razón o motivo aparente, luego una situación generó alertas: el despido “voluntario” de su histórica maquilladora de la diva.

Según trascendió, la maquilladora habría sido “invitada” a sumarse al retiro voluntario que el canal viene ofreciendo a una larga lista de técnicos, productores y colaboradores históricos. Lo que en la superficie se presenta como una “reestructuración” de recursos humanos, se percibe hacia adentro como una señal inequívoca: “Telefé ya no cuenta con el regreso de Susana a su grilla”.

Dicen que, al enterarse, Susana puso el grito en el cielo, y se los hizo saber. Al parecer, se generó una tensión nunca antes vista entre la animadora y las autoridades de la señal.

En ese marco, la versión de mudanza comenzó a tomar cuerpo.
Fuentes cercanas a Adrián Suar -gerente de programación del canal- reconocen que “sería un golpe de efecto fuerte” sumar a la diva, aunque sea en un formato especial, ya que la programación de la señal necesita una figura popular que reactive el prime time.

Ante la viralización de la versión, Telefé actuó. En una medida desesperada, Darío Turovelzky, director de contenidos globales de Paramount, y Federico Levrino, director artístico de contenidos de Telefé y ex productor suyo, la visitaron en su mansión uruguaya y, claro, lo registraron con fotos y videos.
Todo, luego, se subió a las redes, como para “marcar la cancha”: Susana es nuestra y de acá no se va, pareció decir el mensaje encubierto.

Mil millones
Según contaron en “A la tarde” (América), la visita de las autoridades del canal fue con una propuesta tentadora: un ciclo de juegos con premios de hasta ¡mil millones de pesos!, algo que entusiasmó a Susana, que quiere volver a ser lo que era en los 90.