En enero debe pegar la vuelta Palito Pereira, ¿se quedará?

Al lateral izquierdo se le termina su préstamo en Cerro Porteño. ¿Qué resolverá la Secretaría Técnica albirroja?

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Se va terminando el primer tramo del torneo y se avecina el fin de año, tiempo de mercado de pases. En Estudiantes, encima, no pueden repetirse errores. Por eso son semanas de mucho trabajo para la secretaría técnica, que tiene una carpeta larguísima con posibles refuerzos, ventas y jugadores que deben regresar.

En ese ítem se encuentra Álvaro “Palito” Pereira, el jugador uruguayo que está en Cerro Porteño, a préstamo hasta el 31 de diciembre, y debería presentarse a entrenar los primeros días de enero en el Country de cara a la temporada 2019.

Al lateral izquierdo ya lleva dos años en Paraguay, ya que primero se fue por seis meses y luego renovó por un año más. Como en su último ciclo sufrió una lesión, extendió por seis meses más su contrato, que finalizará el 31/12.

En el Pincha no tendría lugar , ya que al momento de su salida no fue muy prolija ni estudiada. En aquel momento se dijo “no vuelve más”. Pero como se suele decir, el tiempo cura las heridas y hoy Pereira necesita volver a la Argentina y Estudiantes no tiene muchos jugadores para hacerlo en ese sector del campo.

Sin lugar a dudas será uno de los temas del mes de diciembre y su posible regreso despertará voces a favor y otras en contra. ¿Qué medida tomará la Secretaría Técnica del Pincha respecto a este jugador, con familia en Los Hornos?

Palito está en el tramo final de su recuperación, que lleva casi seis meses. La semana pasada jugó en el equipo de Reserva y recién tuvo sus primeros minutos de fútbol. Sabe que en poco tiempo la dirigencia de Cerro tendrá que tomar una decisión y él lo dijo públicamente: “Me gustaría seguir acá”. Claro, antes se tendrán que poner de acuerdo los directivos de ambos clubes.

El lateral uruguayo llegó al Pincha en enero de 2015, cuando el técnico era Mauricio Pellegrino. Fue uno de los refuerzos para aquella Copa Libertadores que terminó con Gabriel Milito en el banco de los suplentes. Jugó mucho mientras estuvo, pero después de la gresca en Mar del Plata en el clásico contra Gimnasia la dirigencia decidió negociarlo, primero a Getafe y luego dos préstamos a Cerro Porteño.

Su arribo había despertado mucha polémica, ya que si superaba una cantidad de partidos Estudiantes estaba obligado a comparle la ficha al Inter, por 3,3 millones de euros, una cifra imposible para el fútbol argentino. Fue un dineral hace tres alos y medio; hoy directamente es inviable.

CÓMO FUE PAGANDO LAS CUOTAS

El Pincha pagó la primera cuota con dinero propio y las siguientes gracias a los préstamos con cargo, primero al fútbol español y luego al paraguayo. Además, para restar la deuda el plantel tuvo que viajar a Nueva York para el amistoso de pretemporada contra el neroazzurro, jugado en Nueva Jersey. Todavía la deuda no fue saldada por completo, pero lo que resta no es tan peligroso como hace un tiempo.

 

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