Crece el hartazgo entre padres del Normal 1 por las amenazas de bomba que ya llegaron a 80

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A pesar de estar en franco retroceso en otros establecimientos de la Región, en el Normal 1 las amenazas de bomba siguen batiendo récords. Ayer, el emblemático complejo educativo de plaza Moreno recibió su llamado intimidatorio número 80, en el inicio de una semana lectiva otra vez contaminada por idas, venidas y operativos policiales.

Días atrás, la comunidad del colegio se manifestó pública y enérgicamente contra la ola de amenazas, enarbolando ante las escalinatas del edificio una enorme tijera de cartón que llamaba a “cortarla” con los telefonazos del miedo y con la “falta de respuestas por parte de las autoridades”. En general, los números de amenazas vienen en descenso; hasta agosto en la Región se habían producido 589, con Berisso como distrito más castigado, con 408; seguido por La Plata, con 141 y por Ensenada, con 40. Pero en septiembre y lo que va de octubre esos guarismos se redujeron a la mitad.

En la Justicia creen que el cambio de estrategia para enfrentarlas -que incluyó, entre otras medidas, la unificación de las causas, más de una veintena de detenciones y el blindaje de las escuelas más complicadas por los falsos llamados- fue clave.

 

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