Para River fue uno de esos empates que duelen

No pudo imponer su juego ante el duro equipo colombiano, que mostró el sello de Gregorio Pérez

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En plena etapa una recuperación motorizada por la gran victoria frente a Boca en la final de la Supercopa Argentina, River Plate se volvió a presentar anoche por la Copa Libertadores, torneo en el que empató contra Flamengo en Río de Janeiro en el debut, y se encontró con un Independiente Santa Fe de Bogotá, Colombia, que ni bien se puso en movimiento la pelota dejó ver que tenía el sello de Gregorio Pérez, el uruguayo que está al frente de la conducción técnica.

Una corrida de Lucas Pratto, que llegó por el medio sorprendiendo a los centrales, engañó en la primera jugada seria del partido, puesto que el conjunto de Marcelo Gallardo se encontró con un rival sólido en el fondo, que presionó en todos los sectores del terreno y un par de veces elaboró jugadas de contra que complicaron a la defensa que esperaba. La dinámica de Gonzalo Martínez pareció en un momento que podía servir para abrir el juego, pero no. Sin espacios, casi no hubo llegadas de ataque profundo.

Rodrigo Mora exigió a Robinson Zapata en un tiro libre, y Martínez bajó a uno de los integrantes de la barrera en otra jugada de pelota parada, y el árbitro chileno Julio Bascuñán interrumpìó una maniobra por el costado izquierdo, que Pratto definió con un cabezazo “llovido”, sin que nada pareciera justificarlo. A esto se le sumó un par de remates largos a cargo de Javier Pinola y Enzo Pérez, aunque resultó poquito, casi nada, para un primer tiempo en el que se esperaba mucho más.

De River, por su actualidad, de cuatro triunfos consecutivos, y de Independiente Santa Fe, por los pergaminos con que viajó a la Argentina para presentarse en el estadio Monumental.

Lo que abundó, en cambio, fueron las fricciones, que desembocaron en fuertes entradas, golpes y tarjeta amarilla para Jonatan Maidana, Pinola, que también cometió una falta que pudo ser considerada penal, Víctor Giraldo y Javier López. Además de quienes resultaron víctimas de estos golpes, Franco Armani debió recibir asistencia al golpear contra un palo al salir apresurado para evitar que la pelota se le metiera en el primer palo en oportunidad de un córner ejecutado desde la derecha.

Más de lo mismo cuando se reanudó el partido, tras un paréntesis de 15 minutos en el que por lo visto River no encontró la forma de inclinar el juego a su favor, y por eso mismo Gallardo decidió los ingresos de Ignacio Scocco y Juan Fernando Quintero antes de cumplirse el primer cuarto de hora. Y el colombiano justificó su presencia un par de minutos después, cuando dibujó una jugada en el borde del área y dejó con todo a favor de Pratto, que recibió libre por la derecha y falló en la definición.

Los cambios movilizaron al conjunto Millonario, que enseguida asustó con un anticipo de Gonzalo Martínez, que remató por sobre el travesaño por sobre las figuras de los marcadores que cubrían la ausencia del arquero. El buen pie de Martínez y de Quintero aceleró el juego de River en los últimos metros de la cancha, donde Scocco se convirtió en otra amenaza.

Independiente empezó a sufrir el partido, y cuando el técnico estaba analizando la posibilidad de alguna variante para recomponer la imagen, de pronto generó una situación en el área de enfrente que no terminó en gol de William Tesillo por la reacción de Armani para sacar a un costado el puntazo de corta distancia.

Corría el minuto 26, y se acomodó el visitante, porque recuperó el dominio en defensa, neutralizando a los jugadores más activos, y salió rápido de contra, con pases largos que complicaron a una estructura defensiva que sufrió cada vez que le llegaron en jugadas de pelota parada.

El gol no apareció por Nuñez, y el empate dejó a River, con dos puntos igual que su rival de anoche, en el segundo lugar de un Grupo que domina Flamengo, con cuatro unidades, pero que amenaza con ser apretado hasta el final. Por lo pronto, la escuadra argentina deberá viajar en la próxima fecha a Ecuador para jugar como visitante de Emelec.

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