Audaz robo en Abasto: tras matar al perro, se llevaron dinero y dos autos cargados de comida
| 26 de Julio de 2018 | 19:20

Una familia de Abasto fue víctima en las últimas horas de un audaz robo en el que participaron al menos tres delincuentes. El hecho tuvo lugar este jueves alrededor de las 2 de la madrugada en una vivienda ubicada en 208 entre 472 y 483.
Además de la impotencia y el malestar por el atroz momento que vivieron y por las pérdidas materiales que sufrieron, por estas horas la familia compuesta por un matrimonio y su hija vivía horas de tristeza por la pérdida de una de sus mascotas.
El can falleció producto del plan que orquestaron los tres ladrones para ingresar a la vivienda y poder hacerse de un botín compuesto por dinero en efectivo, dos vehículos y celulares y hasta la mercadería del almacén que tiene la familia.
Según el testimonio de las víctimas que esta tarde fueron entrevistadas por EL DIA, para evitar ser atacados por los dos perros que custodiaban la casa a esa hora, los malvivientes utilizaron unos bocados envenenados que provocaron la muerte casi instantánea de “Pichicho” y la intoxicación de Mona, una rotweiller que este jueves se debatía entre la vida y la muerte en una veterinaria de la zona.
Una vez que lograron doblegar la voluntad de los perros, ingresaron al domicilio. Como contó el dueño de casa, se dió cuenta de la presencia de los ladrones cuando estos se encontraban en su dormitorio. Tras amenazarlo de muerte a él y a su esposa, los ataron a la cama y salieron de la habitación en busca de dinero y objetos de valor.
Fue en esa búsqueda que se toparon con la hija del matrimonio quien fue arrancada de su cama y obligada, bajo amenazas y golpes, a buscar elementos que pudieran agrandar el botín. Tras varios minutos de búsqueda, los ladrones lograron juntar unos 80 mil pesos y algunos celulares.
Siempre con la mente puesta en llevarse la mayor cantidad de objetos de valor, los hombres tomaron las llaves de los dos vehículos de la familia una camioneta Toyota Hilux gris oscura, modelo 2011, y un Renault Clío beige modelo 2013.
Ya eran las 4.00 de la madrugada. Todo estaba listo para que se dieran a la fuga pero a último momento los ladrones decidieron sumar al atraco algunos productos del almacén que tiene la familia. Tras cargar los vehículos con comestibles y demás enseres, los ladrones se fueron.
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