Hallaron enterrada a la odontóloga, pero aún no se sabe cómo la mataron

El cuerpo de Gissella Solis estaba en el Camino Negro. Y las cámaras de seguridad fueron clave para ubicar a la camioneta de Abel Campos en la zona. La víctima no fue estrangulada, ni tenía otras heridas. ¿La envenenaron?

Edición Impresa

“Con esa camioneta podés hacer cualquier cosa, menos mandarte una macana”, reflexionó en voz alta un amigo de Abel Casimiro Campos (55) después de que éste compró, en febrero de 2018, una camioneta Nissan X Terra amarilla usada, con los vidrios polarizados. Menos de un año después, el seguimiento por cámaras de monitoreo que se hizo de esa misma camioneta permitió encontrar el cuerpo de Gissella Solís Calle, la odontóloga de 47 años que salía con Campos desde hacía 8 y de quien nada se se supo en las últimas dos semanas.

Ayer la hallaron enterrada a 40 centímetros de profundidad y a menos de dos metros de lo que alguna vez fue la banquina del Camino Negro que une Villa Elisa con Punta Lara, envuelta en las sábanas de color gris espigado que faltaban de su casa, con los pies atados.

Los investigadores de la DDI encabezados por su jefe, el comisario Inspector Néstor Muñoz, llegaron hasta ese lugar por un intervalo de tiempo que detectaron analizando los movimientos de la camioneta de Campos que registraron las cámaras de Seguridad dependientes del Centro de Operaciones y Monitoreo de La Plata, de Ensenada y de Autopistas de Buenos Aires (Aubasa), el miércoles 16 de enero, entre las 12.38 y las 15.52.

Con esa información, la fiscal Ana Medina ordenó rastrillar desde bien temprano la zona, hasta que a mitad de camino observaron tierra removida y reseca por la ola de calor. Un policía se acercó con un elemento similar a una horquilla y, apenas lo hundió, surgió un vaho nauseabundo. No hizo falta excavar mucho antes de que se asomara el hombro derecho de la víctima.

Antes del mediodía la familia de Gissella reconoció las sábanas que envolvían el cuerpo -las fundas quedaron en la cama de Gissella- tras lo cual lo trasladaron a la morgue de la Policía Científica para hacerle la autopsia ayer mismo. “Estaba en condiciones de ser analizado”, dijo un pesquisa.

La necropsia se programó para las 16. Y el informe preliminar sumó más dudas a este caso signado por el misterio desde el principio. Los forenses no detectaron en la víctima lesiones de ataque ni de defensa, pero tampoco de asfixia, por lo que concluyeron que “no hay causal de muerte evidente”.

El cuerpo no tenía orina; “polo visceral y líquido abdominal putrefacto para toxicología (no hay contenido gástrico); los órganos internos están putrefactos y se tomaron vías aéreas para descartar asfixia”, se detalla en el informe al que accedió este diario.

Campos sacó 60 mil pesos de préstamo, que el lunes le dio a Solis. El miércoles tenía 1.600 dólares

 

Dicho de otro modo, la ausencia de material gástrico permite suponer que la víctima vomitó antes de morir, lo que reforzaría la hipótesis del envenenamiento que surgió a partir del hallazgo de un potente insecticida entre las pertenencias de Campos, después de que en la madrugada del lunes se suicidó de un tiro en la cara en el cuarto 16 del hotel Catedral, en 49 entre 14 y 15.

Había llegado allí a las 9 de la noche del domingo 20 de enero, con una carabina 22 en el bolso de mano, un cuchillo y el veneno.

Las dudas podrán despejarlas los exámenes de toxicología e histopatología que se ordenaron ayer, aunque, en principio, los peritajes previos descartaron la presencia de veneno en el vómito y las dos copas con vino halladas en la casa de Gissella, confiaron fuentes oficiales. Los forenses también mandaron a estudiar la fauna cadavérica, uñas y muestras del hisopado anal, vaginal y bucal.

EL CASO

Solis Calle vivía sola en 127 entre 57 y 58. El martes 15 de enero viajó a Capital Federal, de donde regresó en la Costera Criolla a las 20.20. En un almacén de su barrio compró fiambre y pan. A las 22.50 tuvo un contacto telefónico con uno de sus hermanos y, a las 00.20 del miércoles 16, Abel Campos, con quien salía desde hacía aproximadamente 8 años, llegó a su casa en su camioneta Nissan X Terra.

La hipótesis principal da cuenta de que esa madrugada murió Gissella, aunque no se sabe cómo ni por qué. La causa podrán determinarla futuros estudios. La motivación quizás no se devele nunca.

Estaba claro que Campos había marcado su ingreso en IOMA (donde trabajaba en el Departamento de Veteranos de Malvinas) a las 6.37 del miércoles, aunque había versiones encontradas sobre lo que hizo después, con testigos que lo ubicaban en Magdalena, Guernica o Berisso. A partir de esos datos los investigadores hicieron rastrillajes que involucraron a más de 200 hombres, perros entrenados, y drones, pero sabían que el dato certero lo daría la reconstrucción de los movimientos de Campos con el análisis de las cámaras de monitoreo de la Región. Detectaron así que la Nissan estuvo en la bajada de la autopista en Villa Elisa a las 12.55 de ese día y a las 13.41 pasó por el control policial de la Local, en la misma zona, en sentido contrario.

¿Qué hizo Campos en esos 50 minutos? La respuesta llegó ayer, con el hallazgo del cuerpo.

La causa, abierta como “averiguación de paradero”, se recaratuló como “homicidio agravado”, pero teniendo en cuenta que hasta el momento el principal y único sospechoso está muerto, la acción penal se extinguirá con la confirmación de que no contó con la colaboración de nadie más. En todo el derrotero del miércoles (ver infografía), a Campos se lo ve solo.

 

Cronología

- 15/1 - 22.50 Hs.
Último contacto telefónico con el hermano.

- 17/1
Abel Casimiro Campos -55 años, ex combatiente de Malvinas-, viaja a Lobería en micro.

- 18/1
La familia de Gissella va a su departamento, en 127 e/57 y 58 y no la encuentra.
Faltan sábanas. Hay copas de vino. Hacen la denuncia. Nombran a Campos.

- 19/1
La policía encuentra a Campos en su casa de Tamangueyú, en Lobería. Y lo cita a declarar en la DDI.

- 20/1
La esposa de Campos lo trae a La Plata en su auto y lo deja en la esquina de su casa en City Bell. El se aloja en el hotel Catedral, en 49 entre 14 y 15. La policía lo encuentra y se suicida de un tiro.

- 21/1
Una mujer entrega el celular Samsung J6 de Gissella, que había encontrado el miércoles 16/1 sobre un paredón de 1 entre 40 y 41.

- 22/1
Comienzan los rastrillajes en busca de Gissella, por La Plata, Guernica, Magdalena, Berisso y Ensenada.

- 29/1
El cuerpo de Solis Calle es encontrado enterrado en el Camino Negro, que une Villa Elisa y Punta Lara, envuelta en las sábanas que faltaban de su casa.

 

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE