Guasón: un papel desafiante ¿y maldito?

Es uno de los roles más codiciados: por su complejidad, garantiza aplausos. Pero también tiene consecuencias

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Aunque la actuación de Joaquin Phoenix ha sido mundialmente aplaudida y camina seguro hacia el Oscar, el Guasón definitivo sigue siendo Heath Ledger: el talentoso actor australiano se comprometió tanto con el rol que le terminó costando la vida, dicen algunos. Ledger, claro, tenía un historial de abuso de sustancias, pero su inmersión en el papel, descripta en su desgarrador diario, lo llevó al límite: dormía dos horas por noche porque no podía tranquilizar su mente, hasta que se volvió adicto a las pastillas para dormir. Murió a los 28 años, tras culminar el rodaje, sin saber que el papel le valdría un Premio de la Academia.

En “Joker”, Joaquin Phoenix, como Ledger, también se zambulló en el rol. Y también acusó recibo de su internación en las profundidades de la mente de un psicópata: bajó 20 kilos para interpretar el papel, lo cual provocó una importante merma en su energía y humor que repercutieron en su relación con el resto del elenco. El aislamiento le sirvió para retratar el rencor del personaje, que terminó sufriendo Phoenix, agotado emocionalmente por tener que ingresar en ese estado mental durante semanas. Su inmersión en su criatura, sin embargo, entregó un momento único: aquel baile del baño fue improvisado: Phoenix se había convertido en el Guasón.

Jack Nicholson se metió en la piel del Guasón para la versión de Tim Burton de Batman. Ya habituado a meterse en la piel de mentes psicopáticas, Nicholson se involucró con el personaje porque era uno de sus preferidos en su niñez, pero aún así, al terminar el rol, permaneció en él un saludable miedo por el personaje, a tal punto que cuando Ledger consiguió el papel para la saga de Christopher Nolan y luego murió, Nicholson musitó: “Yo se los advertí”.

La historia del Guasón de César Romero es sin dudas trágica: actor de gran formación, aceptó el papel abrazando la ridiculez caricaturesca de aquella versión sesentosa de Batman para la tevé. Tan poca importancia le daba a su trabajo, que se negó a afeitarse el bigote para el rol: lo maquillaban encima, pero el efecto era increíblemente kitsch. Lo cierto es que este actor terminaría convirtiéndose en sinónimo del Guasón: durante toda su carrera, el neoyorquino con más de un centenar de créditos jamás se despegaría del papel de aquella serie televisiva.

Jared Leto es uno de esos actores que disfruta de papeles que lo obliguen a fuertes transformaciones, cambios físicos que le den premios y reconocimiento: por eso, no dudó en convertirse en el Guasón para “Escuadrón Suicida” y, claro, fue al límite. Cambió radicalmente su look, y pasó todo el rodaje en personaje, lo que probó ser insoportable para sus compañeros, a quienes les envió ratas y cerdos muertos como regalos. Para muchos, sin embargo, su “inmersión” fue superficial y rechazaron su encarnación. Encima, muchas de sus escenas fueron recortadas. El papel, al final, se convirtió en una maldición para Leto, quien desde entonces no la tiene tan fácil para trabajar...

 

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