¿Se la mandó otra vez?: Latorre habría vuelto a las andanzas...

“Cuando el río suena...” agua o piedras trae, suele repetir el refrán, de acuerdo a como lo conozca cada quien.

En esta ocasión, vale la pena traer al recuerdo el temita de “la piedra”, pues según diferentes versiones (y hasta las insinuaciones de una de las protagonistas de la historia), el señor Diego Latorre habría tropezado otra vez.

Sí, luego del escándalo mediático que significó el “puntita-gate” y su infidelidad con Natacha Jait -perdonada por su esposa Yanina- el comentarista de fútbol habría reincidido en el engaño.

Un semanario muy conocido tituló que el matrimonio Latorre estaría en jaque por otro engaño del ex futbolista hacia la panelista de “Los Ángeles de la mañana” y que la ruptura entre ellos sería inminente.

A todo esto, la propia rubia deslizó que está pensando en la posibilidad de “hacer cambios en su vida” y uno de ellos sería el dejar a su esposo.

Esta confesión surgió hace apenas unos días atrás, cuando en el ciclo conducido por Ángel de Brito, la astróloga Jimena Latorre manifestó: “Yanina es de Aries y termina un año brillante, exitosos y triunfando, pero el 2020 es un año difícil porque van a estar muy observados y tienen que empezar a barajar y dar de nuevo”. “¿Cómo en qué cosas?”, fue la pregunta curiosa de la aludida, que fue respondida de inmediato: “Como ver las cosas que no te gustan y sacártelas de la vida”.

Ni lenta ni perezosa, siempre alardeando de estar en procesos de superación y repitiendo que ella todo lo puede, Yanina afirmó: “Estoy en eso, pero esa es la primicia de febrero, no nos adelantemos. La separación… A ver, decime, ¿con Leo (el signo de Diego Latorre) qué tal? ¿Lo rajo del todo o se queda? Estoy pensando si separarme en febrero o no”. Con esta confesión, mitad en broma, mitad “real”, la profesional le propuso, en vivo, sacar una carta para saber más sobre lo que vendrá en su vida. Una vez con esa carta elegida en su poder, Jimena le reconoció sin anestesia: “Y tendrían que ya... Sí. A mí me sale que hay alguien arrastrándole el ala”.