Menos plástico en la cocina

Cómo reemplazar los recipientes y envoltorios de este material por otros que sean reutilizables, biodegradables y más ecológicos

Edición Impresa

El plástico lleva en nuestras vidas menos de 100 años. A partir de los años 30, ingenieros químicos aprendieron a fabricarlo a partir del petróleo: polímeros acrílicos, polietileno, polipropileno, poliestireno, cloruro de polivinilo (PVC) y politetrafluoretileno (PTFE), mejor conocido como teflón.

Una vez que se fabrica una pieza de plástico tardará al menos unos 500 años en desintegrarse. De una forma u otra, todo el plástico que se ha fabricado desde que se comenzó a fabricar plástico, sigue con nosotros.

Este material no se descompone ni se degradar. Se “foto-degrada”, lo que significa que se convierte en pequeños trocitos tóxicos de sí mismo. Trocitos de químicos tóxicos como el bisfenol A (BPA) que terminan en las playas y en el estómago de los animales.

Para reducir su consumo hay algunos trucos que se pueden implementar fácilmente. En este caso, mostramos algunos referidos a cómo guardar alimentos sin utilizar recipientes de plástico.

VIDRIO

Vienen de varios tamaños e incluso se pueden limpiar y reutilizar frascos de conservas que ya se hayan consumido. Son una buena opción, tanto para líquidos como para sólidos. Desde caldos y sopas, a smoothies, ensaladas, salsas y vinagretas, hierbas y especias, frutos secos, harinas y legumbres.

Los recipientes de vidrio también son muy útiles para almacenar verduras limpias y cortadas.

ACERO INOXIDABLE

Estos envases son una alternativa más ligera a los de vidrio. Se los puede encontrar en distintos formatos y hasta con algunos compartimentos, térmicos y herméticos.

El acero inoxidable es muy práctico y duradero. Sólo hay que asegurarse de que sean de acero inoxidable de grado alimentario 100% y no de aluminio.

TELA

Existen unas bolsas de tela reutilizables para transportar almuerzos y snacks de una forma cómoda, saludable y sostenible. Así se reemplazan los recipientes y bolsas plásticas.

Es más, algunas marcas las ofrecen hechas en telas orgánicas y sin tóxicos. Se pueden lavar fácilmente en el lavarropas.

ENVOLTORIO DE CERA DE ABEJAS

Envoltorios de cera de abejas. Se pueden usar exactamente de la misma manera que el film o el aluminio. Por ejemplo, para cubrir frutas o verduras cortadas por la mitad, tapar recipientes o envolver alimentos como el queso. Además se puede moldear y hacer bolsitas o sobres para guardar frutos secos o hierbas frescas. Sólo se necesita el calor de las manos para que se adhiera alrededor de un cuenco u otra cosa. Estos envoltorios están hechos de tela de algodón y cáñamo, recubiertos con cera de abeja. Con un correcto uso y cuidado, pueden llegar a durar un año. Sólo hay que lavarlos con agua fría y un poco de jabón blanco.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE