Al mediodía, dos disparos, una persecución de varias cuadras y una moto robada

Eran dos sujetos, ambos armados. La víctima denunció que lo acosaron a lo largo de dos kilómetros sin que intervenga la policía

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El viernes último, Luis Quiroga (42) había aprovechado parte de la mañana para llevar a cabo unas compras. En vez de salir con el auto, para “hacer más rápido” utilizó su moto, una Honda XRE 300 cc. Minutos antes del mediodía, al llegar al cruce de 21 y 37, otra moto -una XR 125 cc negra y roja- con dos sujetos se le puso a la par.

Ambos tenían “cascos negros y ropa oscura”, recordó en diálogo con EL DIA. El que iba de acompañante lo miró y le dijo: “Qué linda máquina”.

Quiroga, con plena sospecha de que lo iban a asaltar, aceleró. Enseguida vio que su conjetura no estaba errada. Detrás de él, también a alta velocidad, venían los desconocidos. Uno de ellos portaba un arma y lo apuntaba.

DOS KILÓMETROS Y DOS TIROS

La persecución comenzó en 21 y 37, pero se extendió por varias calles del barrio La Loma. En segundos llegaron a 27 y 37 y cuando Quiroga giró la cabeza los divisó a unos metros. “La verdad no sabía qué hacer, porque veníamos muy rápido y en un par de oportunidades estuve cerca de chocar con los autos que iba esquivando”, denunció.

Al doblar por 27, en dirección a la zona norte de la Ciudad, sacó el teléfono celular de uno de sus bolsillos y marcó al 911. Como pudo, refirió lo que era perseguido con fines de robo. La llamada se cortó abruptamente cuando Luis escuchó “una detonación que venía de atrás”.

El disparo lo amedrentó. Sin embargo, con la aguja a punto de “explotar” del velocímetro continuó hasta llegar a 44. Allí dobló y, a mitad del camino, decidió que lo mejor era frenar y entregar el vehículo.

“Me bajé y me fui contra la pared con las manos en alto, pero igual uno de los dos tipos me tiró. Por suerte la bala no me pegó en ninguna parte del cuerpo”, sostuvo. Asimismo, aseguró que varias personas que en ese momento circulaban por la escena “vieron todo lo que pasó”.

Uno de los delincuentes se subió a la moto de Quiroga y huyó en dirección a 25, seguido por su cómplice. Apenas los perdió de vista, el damnificado se dirigió hacia la Comisaría Cuarta a radicar la denuncia.

De acuerdo a lo manifestado por la víctima, la oficial que le tomó la denuncia “me tomó la declaración así nomás, no dispuso ninguna medida a pesar de que aporté varios datos”. Por otro lado, agregó que “también hay filmaciones de varias cámaras de seguridad que registraron” la secuencia y en las imágenes “se tiene que ver la patente de la moto que usaban” los ladrones.

Quiroga denunció el accionar de la agente “a Asuntos Internos y en la DDI”, y por la tarde “volví a hacer una declaración detallada con el subcomisario, que me atendió muy bien”, finalizó.

 

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