Con un cuento del tío, le quitaron más de 130 mil pesos a una jubilada de Ensenada

Un delincuente se presentó en la casa de la víctima, simulando ser un empleado del Banco Nación. Además de los ahorros, le robó joyas

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En los últimos años fueron varios los jubilados que, tanto en nuestra Región como en otras zonas, fueron engañados mediante estrategias bien estudiadas por delincuentes especializados en sorprender a sus víctimas en su buena fe y así robarles dinero y otros elementos de valor.

Pese a la difusión del tema la modalidad sigue manteniendo vigencia y efectividad. Y, a decir de algunos vecinos de Ensenada que se contactaron con este diario, en los últimos días hubo no menos de cuatro casos que tuvieron a personas jubiladas de ambos sexos como damnificadas en esa zona.

Por ello se sospecha que estaría actuando una misma banda, ya que en al menos dos de esos episodios, los ladrones implementaron un ardid similar.

“ES POR DECRETO DEL PRESIDENTE”

Una de las víctimas de estos “cuentos del tío” es una mujer de 79 años que vive en su casa de la calle San Martín entre Don Bosco y Colombia, a dos cuadras de la municipalidad de Ensenada.

Según contó ayer a EL DIA una hija suya, María (42), en la puerta de la vivienda de la damnificada, la farsa por la cual la despojaron de una importante cantidad de dinero y joyas ocurrió a las 3 y media de la tarde del martes.

“Un hombre llamó a mamá a su número de celular, haciéndose pasar por un hermano mío. Cuando lo atendió, el delincuente le dijo `hola mami´, pero mamá le hizo notar que tenía rara la voz y el tipo le aseguró”, sin salir del papel, “que estaba en el Banco y que el aire acondicionado lo había afectado”, detalló María.

El falso hijo de la jubilada, de quien no se suministra la identidad por pedido de su hija, le comunicó a la víctima que en un rato pasaría por su casa un empleado del Banco Nación para retirar todos los dólares y pesos que tuviera, “ya que por un inexistente decreto del presidente Alberto Fernández era el último día que tenía para cambiar los billetes por otros que iban a entrar en circulación”.

Un rato más tarde llegó al domicilio de la jubilada un hombre de entre 45 y 50 años, rubio, con bigote, camisa blanca, un morral y un sobre de papel madera. “Vino en un auto Volkswagen Bora o en un Volkswagen Voyage, que estacionó en la esquina de San Martín y Don Bosco, para llegar acá caminando”, contó María. Todos esos movimientos fueron filmados por e, por lo que quedó registrado por una cámara de seguridad privada que hay en la cuadra,

La jubilada lo atendió pero sin abrir la puerta de reja del frente de su domicilio. Tampoco el delincuente necesitó que lo hiciera, ya que “abrió el sobre para que mamá depositara ahí todo el dinero, 800 dólares y 80.000 pesos”, reveló la mujer.

En principio su madre había entregado al desconocido un monto menor, pero aquél, según puntualizó María, “le dijo que pusiera la totalidad de los billetes que tuviera, porque le dijo `su hijo me comentó que usted tiene una suma de dinero mayor`y así la convenció de darle más plata”.

Eso no fue todo. Además, el delincuente le pidió a su víctima que le diera todo lo que tuviera de oro, consiguiendo que le entregara también “las alianzas de matrimonio, cadenas, medallas y aros”.

“Este tipo tuvo la suerte de que justo la encontró en un ratito que estaba sola, porque mi mamá siempre está acompañada, por algún familiar o por una chica”, lamentó María.

Fue el primer robo sufrido por esta jubilada en los 60 años que lleva en ese barrio

 

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