Incorporan a las personas obesas entre los grupos de riesgo

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El Ministerio de Salud incorporó a las personas con obesidad entre los grupos de riesgo frente al coronavirus, según se publicó ayer en el Boletín Oficial.

“Por la experiencia observada en otros países y la prevalencia de casos, la evidencia reconoció a la obesidad como un factor asociado a mayor riesgo de contraer la enfermedad y de sufrir evolución desfavorable de la misma”, consignó la Resolución 1541/2020 de la cartera sanitaria, publicada como se dijo ayer.

En sus fundamentos, se explicó que la decisión se debe a que “existen múltiples mecanismos fisiopatológicos que explican esta predisposición, incluyendo presencia de un estado inflamatorio crónico, desregulación de la respuesta inmune, exceso de estrés oxidativo y producción aumentada crónica de leptina; y asimismo, el tejido adiposo podría sobreexpresar el receptor de la enzima convertidora de la angiotensina 2, implicado en la invasión intracelular del virus”.

En ese sentido, “corresponde sustituir el artículo 3° de la Resolución N° 627/2020, procediendo a incorporar las personas con obesidad dentro de los grupos de riesgo definidos en la referida Resolución, en el marco de lo dispuesto por el artículo 1° del Decreto N° 260/2020”.

De este modo, los actuales grupos de riesgo para la COVID-19 son las personas con enfermedades respiratorias crónicas: hernia diafragmática, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfisema congénito, displasia broncopulmonar, traqueostomizados crónicos, bronquiectasias, fibrosis quística y asma moderado o severo.

También las personas con enfermedades cardíacas: insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria, reemplazo valvular, valvulopatías y cardiopatías congénitas; y quienes sufren diabetes.

Se suman a esa nómina las personas con insuficiencia renal crónica en diálisis o con expectativas de ingresar a diálisis, las que padecen inmunodeficiencias congénitas, como asplenia funcional o anatómica (incluida anemia drepanocítica) y desnutrición grave.

También, son considerados grupos de riesgo para el coronavirus quienes viven con VIH dependiendo del status, las personas con medicación inmunosupresora o corticoides en altas dosis, los pacientes oncológicos y trasplantados, y quienes padecen enfermedad oncohematológica hasta seis meses posteriores a la remisión completa.

La lista se completa con quienes tienen tumor de órgano sólido en tratamiento, trasplantados y personas con certificado único de discapacidad.

En lo que hace puntualmente a la obesidad, la infectóloga Leda Guzzi apuntó que se “se trata de un factor de riesgo de mortalidad en pacientes con COVID-19, no solo cuando se analiza la variable en conjunto con otras que suelen asociarse a la mortalidad como la hipertensión o la diabetes, sino también cuando se analiza en forma desagregada, es decir, sola”.

Guzzi, integrante de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), sostuvo que “los pacientes obesos tienen una serie de problemas que afectan a su salud; en primer lugar hay que reconocer que se trata de una enfermedad inflamatoria crónica que afecta en forma directa la inmunidad celular tanto innata como adaptativa”.

La infectóloga agregó que “sabemos también que las personas obesas tienen una alteración de la capacidad de respuesta citotóxica, que es también parte de la respuesta inmunológica y tiene un rol muy importante en control de las infecciones virales”.

 

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