La Ciudad desafiada por una drástica caída de su actividad económica

Edición Impresa

Los datos de la realidad, lo que marcan las estadísticas, los testimonios de los empresarios y la opinión de los especialistas coinciden en señalar que La Plata viene sufriendo en la actualidad la peor crisis en la historia de la actividad económica, en un proceso que se inició hace dos años y que ahora está causando grave mella en los sectores comerciales y productivos. Desde luego que el declive se acentuó en 2020 con la llegada de la pandemia y las medidas de aislamiento, que frenaron en forma abrupta la ya golpeada economía platense.

Tal como se informó ayer, durante el segundo trimestre de este año la actividad económica disminuyó un 22,2 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, según el índice que dio a conocer el Laboratorio de Desarrollo Sectorial y Territorial de la facultad de Ciencias Económicas de La Plata.

Según explicaron los autores y coordinadores del registro, la caída acumulada de la economía desde el segundo trimestre de 2018 hasta abril-junio 2020, es de un 27 por ciento, más de un cuarto del producto bruto de La Plata.

Las ramas con mayor nivel de caída son la actividad inmobiliaria, hotelería, restaurantes y servicio doméstico. Las escrituras de compraventa cayeron 92 por ciento interanual en el segundo trimestre; en tanto que hotelería y restaurantes un 73 por ciento.

En el informe se resalta que, por sus características productivas, La Plata encuentra un soporte en las crisis en su administración pública, educación y salud pública, que hacen mantener la demanda agregada. Sin embargo, en esta ocasión el soporte no ha funcionado porque la pandemia llevó a la necesidad de restringir la oferta (industria y negocios cerrados, restricciones para circular) lo que explica las caídas en los sectores industriales, comerciales, de construcción y transporte.

Representantes de distintas entidades empresarias como la CIBA (que nuclea al sector imobiliario) Apymeco (construcción), Asociación amigos de calle 12 (comercio) y de la FELP (empresarios), aludieron a los distintos factores que precipitaron la crisis. Entre otros mencionaron la extensa cuarentena de seis meses que paralizó obras y que tiene el efecto de ser un verdadero golpe de gracia para muchos emprendimientos; al temor que hoy origina invertir en compra de lotes por las usurpaciones y a la crisis general que obligó al cierre de muchos comercios y que pone al resto contra las cuerdas.

Uno de los especialistas consultados sostuvo que el rubro más afectado fue el inmobiliario, con una caía del 92 por ciento en las compraventas de propiedades. Dijo que “durante abril y parte de mayo el Registro de la Propiedad se encontraba cerrado, razón que explica parte de este valor. Sin embargo, no hay que olvidar el elevado valor en dólares de las propiedades, el nulo acceso al crédito para vivienda y la merma de la actividad comercial y de ingresos de la ciudad como factores explicativos adicionales”.

Dijo asimismo que otros sectores que también sufrieron un impacto devastador en su actividad son los ligados a la vida social, como hotelería y restaurantes (-73 por ciento y servicios comunitarios y domésticos (-69 por ciento). Asimismo, un sector muy ligado al inmobiliario, la construcción también debió frenar la actividad durante el segundo trimestre del año, y experimentó una caída de 64 por ciento.

Comercios, industrias y servicios luchan por sobrevivir y proyectarse hacia un futuro mejor. Está claro que hacen falta medidas crediticias, impositivas y de otro tipo de estímulos que debieran promoverse cuanto antes.

Los problemas que plantea esta recesión son de enorme magnitud y el empresariado puede dar fe de ello.

No se trata de propiciar programas declamativos, sino muy concretos y surgidos de acuerdos de reactivación. Es de esperar que el Estado asista a tantos pequeños y grandes empresarios que, optimizando su gestión, podrán resurgir y darle nuevamente plenitud a la vida económica de la Ciudad.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE