Habilitan el Congreso hasta fin de año para tratar el acuerdo con el FMI

Extienden las ordinarias hasta el 31 de diciembre y en la Rosada buscan dar señales de consenso con la oposición

Edición Impresa

Con un movimiento que pretende acercar posiciones con la oposición y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno prorrogará las sesiones ordinarias del Congreso hasta el 31 de diciembre.

La decisión de mantener la actividad en el Parlamento hasta el último día del año, según desgranaron fuentes de la Casa Rosada, busca mostrar en los hechos la predisposición al diálogo con la oposición que el Presidente, Alberto Fernández, anticipó tras las elecciones legislativas del domingo. Y lo hará prolongando las sesiones ordinarias, con lo que todas las fuerzas políticas podrán fijar su propia agenda de temas y prioridades. Se descarta, en cambio, un llamado a sesiones extraordinarias, en las que -por norma interna- el Poder Ejecutivo es el que propone el temario.

En Balcarce 50 subrayaron que la decisión obedece al intento de “demostrar intención de diálogo” con la oposición de Juntos por el Cambio y el resto de los espacios, ante la necesidad de consensuar apoyos en torno a un acuerdo con el FMI.

La extensión de las sesiones legislativas, que por ahora corren hasta el 10 de diciembre, sería hasta el 31 de diciembre. Aunque en la práctica se llevarían a cabo hasta el 22. En paralelo, se realizarán las sesiones preparatorias para la jura de autoridades que se realizará el 10 de diciembre.

El acuerdo con el Fondo

Horas después de la derrota legislativa del Frente de Todos en la mayoría de los distritos del país, el Presidente prometió enviar al Congreso, “en los primeros días de diciembre”, un plan para refinanciar la deuda externa. Un proyecto que deherá aprobar con el apoyo de Juntos por el Cambio.

Justamente, eso fue lo que reclamaron en las últimas horas voceros del Fondo Monetario Internacional, al advertir que el plan económico del Presidente debe contar con “un amplio apoyo político y social” y hacer frente a la “alta inflación” que sufre la Argentina.

El programa que el oficialismo quiere debatir en el Congreso tiene su basamento en las negociaciones del Gobierno con el FMI para llegar a un acuerdo que permita refinanciar la deuda de 45.000 millones de dólares contraída durante la presidencia de Mauricio Macri.

Los detalles de ese plan son hoy analizados por el Ministro de Economía Martín Guzmán, que lo guarda bajo siete llaves. No obstante ayer, desde el Banco Central que conduce Miguel Ángel Pesce salieron a asegurar que, de cara al año próximo, el acuerdo que se alcance con el FMI para reestructurar la deuda “ayudará a mejorar las expectativas” de los actores que ponen en duda el resultado de esa negociación, lo que contribuirá a “contener las presiones cambiarias y las expectativas de inflación”, según expuso el último Informe de Política Monetaria.

Además de la necesidad de acordar con el Fondo, la agenda legislativa del Gobierno se nutre de otros temas no menos importantes. Entre ellos, la aprobación del Presupuesto 2022, que se viene postergando desde septiembre.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE