El Superclásico no tuvo dueño y el empate no conformó a ninguno

Boca y River terminaron 1-1 en La Bombonera, en un partido que se hizo vibrante en el segundo tiempo y que pudo haber sido para cualquiera de los dos. Villa y Palavecino convirtieron los goles

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Boca y River empataron ayer 1-1 en La Bombonera por la quinta jornada de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol, una igualdad justa porque ambos equipos tuvieron chances de ganar el partido más destacado del fútbol argentino.

El colombiano Sebastián Villa adelantó a Boca, de penal; en el primer tiempo y Agustín Palavecino, de cabeza (uno de los debutantes), selló el empate para River en la parte complementaria.

Pudo haber sido para cualquiera de los dos y los arqueros, tanto Franco Armani como Esteban Andrada, tuvieron incidencias para que no hubiese un ganador. El arquero de River tapó una pelota increíble en el primer capítulo, cuando Carlos Tevez se aprestaba a marcar el gol.

El último penal que le dieron a Boca en La Bombonera, en un clásico, fue en el Apertura 2006

 

Y Esteban Andrada, con algunos dudas en el comienzo, desbarató un intento Millonario en la segunda mitad, sacándole el grito de gol a Bruno Zuculini.

RIVER, DUEÑO DE LA PELOTA

River acaparó la posesión de la pelota desde el arranque del encuentro con la buena movilidad del debutante como titular Agustín Palavecino en compañía del uruguayo Nicolás De La Cruz.

Ambos realizaron cambios en nombres y sistemas. Boca, sin Edwin Cardona por lesión, se paró con línea de tres en el fondo y River presentó cuatro en defensa, entre ellos Jonathan Maidana, más la novedad de Palavecino para un 4-3-3.

Sin brillar, River exhibió mejor funcionamiento que Boca, con remates al arco y una situación clara a los 19 minutos cuando Lisandro López rechazó la pelota cerca de la línea y subsanó el error de Esteban Andrada en su intento de achique lejos ante De La Cruz.

Boca entendió que Palavecino movía los hilos en ataque y fue cuando el juvenil Medina tomó esa marca.

Fue pegajosa por momentos, porque la idea era neutralizar ese zona para que el circuito de juego de River no pudiera progresar.

Desde entonces, la presencia de River disminuyó con un Enzo Pérez preocupado por Tevez, que leyó muy bien el partido. Lo llevó contra los costados y lo complicó porque le cometió más de una infracción.

Boca se animó sobre el final y fue más práctico ante un River flojo en defensa.

El “Xeneize” avisó con el mano a mano que Armani tapó ante Tevez y luego se puso al frente con el penal de Villa, generado por la infracción infantil del chileno Paulo Díaz a Agustín Capaldo cuyo inicio de jugada se propició con un taco del Apache.

Capaldo tuvo hasta ahí una gran labor porque tapó la proyección de Angileri con creces y aportó en ataque cada vez que encontró los espacios.

RIVER INTENTÓ, PERO BOCA LO SUPO CONTROLAR

River intentó mejorar su producción en el comienzo de la segunda etapa, con más participación de Jorge Carrascal, pero sin profundidad ante una defensa de Boca bien parada sostenida por López e Izquierdoz, quienes se esgrimieron en la columna vertebral en el equipo que conduce técnicamente Miguel Angel Russo.

Boca esperó agazapado a la espera de una contra frente a un River endeble para defender.

Franco Armani, el jugador más destacado de la visita, tuvo una gran intervención con los remates de Carlos Tevez y Sebastián Villa en la misma jugada con un manotazo ante la presencia de Maroni (16m) que dejó a River en partido.

La primera vez que Angileri desbordó con éxito a Capaldo propició el gol del empate.

El ex Godoy Cruz envió el centro para el arqueo perfecto de Palavecino quien de cabeza dejó sin chances a Andrada.

Con ese golpe de River se dio otro partido porque además Boca sufrió la expulsión del peruano Carlos Zambrano por doble amarilla (codazo a De la Cruz).

Andrada se lució con la tapada ante un remate de frente de Angileri (a los 29 minutos) y salvó a Boca que tuvo el debut de Marcos Rojo con el ingreso por Maroni, que no gravitó en absoluto a lo largo del encuentro.

Cuando River había recobrado el aliento sufrió la expulsión de Milton Casco por doble amarilla, pero tuvo una situación muy clara a un minuto del final con el centro de Federico Girotti que dio en Carlos Izquierdoz.

El pique de la pelota frenó su ingreso al arco y entre Andrada, Capaldo y el palo sostuvieron el empate en la misma jugada.

Boca y River no se sacaron diferencias en un Superclásico cambiante en el que el Xeneize no lo liquidó cuando debía y el Millonario no pudo concretar cuando la ocasión se le presentó.

Boca suma nueve puntos en la zona 1 y River tiene siete en la zona 2, fuera de la zona de clasificación.

En la próxima fecha, Boca recibirá en La Bombonera Talleres (viene de perder con Vélez, en Córdoba); mientras que el cuadro Millonario viajará hasta la provincia de Mendoza para medir fuerzas con Godoy Cruz.

 

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