River hizo lo que tenía que hacer: goleó a Aldosivi y espera por Boca

Luego de las derrotas ante el Ciclón y Banfield, el Millonario se recuperó. Pero en el juego todavía sigue sin convencer. Y justo lo espera el Xeneize

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Sin brillar, porque más allá del resultado debió transpirar más de lo imaginado, River avanzó a cuartos de final de la Copa de la Liga profesional con un triunfo por 4 a 1 ante Aldosivi, que dejó ver errores en todas las líneas, una constante para el equipo que dirige Marcelo Gallardo en al presente certamen. Ahora, en el camino asoma Boca, su rival en la instancia eliminatoria.

Afuera Enzo Pérez, por un síndrome gastrointestinal, River se presentó sin un “5 de marca”, lo que significó, más que nunca, plantear un partido de ataque, lo cual fue aceptado por un rival sin el caudal de juego suficiente como para usufructuar el golpe por golpe que en un momento fue el partido. Una mano de Jonatan Schunke dentro del área alimentó la apertura a cargo de Montiel, en camino de ser un “especialista” en la ejecución de remates desde el punto del penal. Pero no aprovechó el “viento a favor”, desaprovechó una serie de jugadas de alto riesgo y en contrapartida, un cabezazo en el área propia certificó la paridad.

La formación de Nuñez lució en pasajes de la primera etapa un tanto desorientado en la franja central, sector en el que Nicolás De La Cruz y Agustín Palavecino se alternaron para ocupar la posición dejada vacante por Enzo Pérez, el habitual encargado de la organización del juego. Leandro Maciel le pegó de media distancia, y la pelota explotó en el travesaño, y en la jugada siguiente, Franco Armani sacó un remate de Gastón Lodico. El arquero fue exigido nuevamente en un tiro libre de Lodico y al minuto, desde un córner, se produjo el empate de Aldosivi con el cabezazo sin marcas de Braida.

River se recuperó con el gol de Borré, la mejor jugada colectiva del equipo riverplatense, en la conexión que incluyó a Jorge Carrascal (otra vez intermitente en su rendimiento) y Fabricio Angileri, quien envió el centro para el colombiano que festejó con una pequeña bandera con los colores de su país, que atraviesa una difícil situación social.

River fue por más en el inicio del segundo tiempo cuando Borré dispuso de un mano a mano que Fabián Assmann desvió al córner. Aldosivi retomó la posesión de la pelota frente a un rival que lo esperó. Una postal poco inusual en un equipo de Gallardo, quien movió el banco de los suplentes con los ingresos de Alex Vigo por Montiel y José Paradela por Carrascal.

River no lo liquidaba y Aldosivi monopolizaba la pelota. El resultado entró en una zona de riesgo para el local porque un gol de los marplatenses lo dejaba afuera de los cuartos. El buen juego del visitante se diluyó y aparecieron las individualidades de River en mejor forma, de la mano del uruguayo De La Cruz. Assmann tapó otro mano a mano, esta vez ante Paradela y el propio ex Gimnasia selló el 3-1 luego de una buena sociedad con el ingresado Matías Suárez, el cordobés que retornó al equipo después de dos meses y quien en el día de su cumpleaños 33 estiró la ventaja con otro destello de su calidad.

En estos términos, con matices que nuevamente mostraron a River como un equipo repleto de buenas intenciones, abierto para un juego dinámico y con el arco de enfrente como objetivo central, pero descuidado en defensa, sector que otra vez apareció muy permeable, ganó por un amplió 4-1 pero sin reafirmar una imagen que en las últimas semanas, en particular durante la actual Copa de la Liga Profesional, pareció estar muy lejana de aquella que lo instaló como el mejor equipo de América.

 

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