Los afortunados se hicieron sentir en el estadio Maracaná

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No todos los argentinos que hicieron lo posible por una credencial para entrar al Maracaná pudieron hacer realidad el sueño, pero quienes tuvieron la posibilidad de ser testigos presenciales de una final histórica, más porque se desarrolló en su mayor parte sin público en las tribunas, se hicieron sentir ni bien se ubicaron en el sector correspondiente. Mantener el barbijo colocado fue uno de las recomendaciones, aunque cuando el plantel ingresó al campo de juego para realizar el calentamiento precompetitivo, con Lionel Messi como principal atracción, la protección quedó de lado y los 2.200 afortunados comenzaron a gritar una ilusión que se multiplicó ni bien la pelota comenzó a rodar.

“Que de la mano, de Leo Messi, todos la vuelta vamos a dar” y “Olé, Olé, Olé, Olé, Diegooo, Diegooo”, en homenaje a Maradona, fueron los cánticos que contagiaron, y por supuesto no faltó aquel “Brasil, decime que se siente, tener en casa a tu papá”, que explotó en cada rincón del país organizador de esta Copa en oportunidad del Mundial 2014 que el seleccionado dirigido por Alejandro Sabella definió contra Alemania.

 

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