A los motochorros se suman las banditas de menores “que nunca se fueron” del barrio

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María Laura Palavecino vive hace 41 años en el barrio El Mondongo, en una casa situada en 120 y 68. Ayer por la madrugada, por primera vez, dos ladrones ingresaron para sustraer dos bicicletas que tenían en la parte delantera de la propiedad.

“Está terrible el barrio, mucha impunidad hay. Nosotros vivimos en la calle cortada, al fondo de todo, y es muy raro cómo se metieron al patio de casa y se llevaron dos bicicletas, una playera roja y una todoterreno”, contó. El hecho ocurrió pasadas las 2 de la madrugada y, según confió la víctima, los delincuentes “tuvieron algo de suerte”.

“Gracias a Dios no pasó a mayores, porque estábamos todos adentro. Entraron como si nada, no sé si venían viendo la casa de antemano, y tenemos perros pero justo anoche los entramos porque estaba lloviendo mucho”, refirió. “A las bicis, que las usábamos mi marido y yo para ir a trabajar, no las atamos”, añadió.

Por otro lado, expuso que “estamos esperando más imágenes para ver las caras de estos chorros”, al tiempo que indicó que “hace unos 20 días, los vecinos perseguían a un ladrón que escapaba y la perra lo arrinconó contra la pared. Zafó porque subió por el techo y se escapó hacia la 121”.

Por último, apreció que “está tremenda la zona esta con los robos. Acá, nunca bajó el delito. El año pasado le tocó a unas chicas que viven al lado”.

 

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