Mataron a un changarín de un escopetazo en la cabeza

El tirador, al que casi linchan y le queman la casa, tiene 74 años. Dijo que reaccionó por un reciente robo que le habría cometido la víctima

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Un joven de 28 años fue asesinado de un escopetazo en la cabeza, mientras circulaba en un carro por un barrio de la capital tucumana y por el crimen detuvieron a un hombre de 74, quien se sospecha atacó a la víctima, porque esta supuestamente le había robado una motocicleta días atrás, informaron fuentes judiciales.

El hecho se registró el sábado pasado cuando la víctima, identificada como Ariel Melián (28), circulaba junto a otra persona en un carro tirado por un caballo por avenida Alem y López Mañan, en el Barrio Sur de San Miguel de Tucumán.

Todo quedó registrado en una cámara de seguridad de la zona, en la que se ve que un hombre se acerca al carro y, sin mediar palabra, dispara con una escopeta contra uno de los ocupantes.

Fuentes judiciales confirmaron que ese mismo día, por la tarde, fue aprehendido el presunto autor del crimen, identificado como Miguel Bartolomé Cajal (74), en su vivienda de la avenida Alem al 2300.

El fiscal Carlos Sale, a cargo de la Unidad Fiscal de Homicidios II, ordenó para el allanamiento de su domicilio para secuestrar elementos de interés para la causa, en especial la escopeta utilizada en el hecho.

“Melián es un chico con muchos antecedentes y que según lo que se obtuvo de las primeras declaraciones de testigos, el móvil podría ser el robo de la moto de Cajal, unos días atrás”, conjeturó un investigador.

Las pericias están a cargo del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) del Ministerio Fiscal y la División Homicidios de la Policía de Tucumán.

Por su parte, el fiscal Sale cuenta con 48 horas para llevar adelante la audiencia de formulación de cargos contra el acusado, añadieron las fuentes.

TENSIÓN

En el marco de una creciente tensión por lo sucedido, familiares del fallecido intentaron linchar al jubilado y, se congregaron en la puerta de su domicilio, con intenciones de prenderlo fuego.

Sin embargo, la presencia policial logró dispersar a los manifestantes y evitar que esa intención de venganza pudiera llevarse a cabo.

Las imágenes del hecho, que circularon por las redes sociales, realmente causaron gran impacto y sensibilidad.

En ese material se ve como una mujer sostiene al joven asesinado, que tiene el cráneo literalmente arrasado por el impacto de la munición de escopeta a tan corta distancia.

 

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