El dolor de rodilla del Papa se complica

Edición Impresa

CIUDAD DEL VATICANO

El papa Francisco no asistió a la audiencia que tenía prevista para ayer con el Comité Judío para las ConsuItas Interreligiosas al agudizarse su dolor en la rodilla derecha, según informó el Vaticano.

Aunque durante la mañana había recibido a la delegación del patriarcado ecuménico en su residencia de Santa Marta, Francisco no acudió a la otra cita prevista en el palacio pontificio.

De esta manera, el Papa vuelve a anular actos de su agenda por la gonalgia (dolor generalizado de articulación de la rodilla) que sufre desde hace meses y de la que parecía que estaba mejorando después de que se lo vio hace unos días andando ayudado con un bastón y sin la silla de ruedas que había empezado a usar.

Incluso en una reunión con los obispos brasileños les había confesado que hacía algunos días que ya podía caminar sin la silla de ruedas.

Fuentes vaticanas señalaron que quizás la agudización del dolor se debe a los últimos eventos en los que ha participado Francisco, como la misa de San Pedro y Pablo en la que estuvo mucho tiempo de pie.

Sus problemas en la rodilla derecha lo obligaron incluso a suspender el viaje a África, concretamente a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur previsto para principios de este mes de julio, por lo que ahora se teme por lo que podrá ocurrir con la visita a Canadá, confirmada por el Vaticano del 24 al 30 del mismo mes.

Francisco tampoco ofició el sábado pasado la misa de clausura del X Encuentro de la Familia.

Hace algunos días, durante la reunión con los obispos italianos, Francisco les confesó que no quería operarse y que continuará con las infiltraciones para curar su dolencia, según reveló el diario “Il Messagero”. (EFE)

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE