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RUEGO NAVIDEÑO

Sara Alicia Canestri, expresa: “Nunca recé tanto por nuestro pueblo. En la palabra  involucro a dirigentes y demás personas que integramos este bendito suelo argentino. Temo el desafío piquetero. El fantasma de 2001 y de los ´70 sobrevuelan tal acontecimiento. No le temo a la gente; me preocupan los agitadores propios y ajenos, que nunca faltan en dichas ocasiones.  Quiero un país  ordenado y próspero. En el cual haya una clase dirigente capacitada ,responsable y que predique con el ejemplo. Una clase media formada por empleados genuinos, no ñoquis nombrados por el político de turno y profesionales que puedan trabajar y cobrar  de acuerdo a su capacidad y esfuerzo. Y por último una clase trabajadora que no tenga que depender del Estado, educada y preparada para la tarea que desempeña. La clase dirigente tiene la obligación de garantizar trabajo digno para así tener un país como el que soñamos y al que nunca alcanzamos.
Supimos tenerlo,  pero poco a poco nos convertimos  en lo que somos hoy: un país de gente ventajera,  sin palabra, y sin credibilidad. ¿Tendré que rezar mucho más?”