Una cañita voladora provocó un incendio en una torre de 19, 39 y 40

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Minutos después de comenzado el año nuevo, vecinos de un edificio ubicado en la avenida 19 al numeral 361, entre 39 y 40, fueron alertados que en uno de los balcones del noveno piso había un principio de incendio.

Aparentemente, por lo que refirieron algunos testigos presenciales, una cañita voladora, que perdió su rumbo, entró por el frente de uno de los departamentos y provocó que se incendiara una silla playera, un tender y hasta parte de un deck.

Desesperados, el grupo de chat interno estalló y la desesperación se apoderó de cada uno de los propietarios, varios de los cuales no se encontraban presentes en la construcción, como fue el caso del dueño de la unidad funcional donde se produjo el foco ígneo.

Por eso, mientras los consorcistas empezaron a llamar al 911 para pedir la presencia de una dotación de bomberos y se aguardaba por su arribo, algunos decidieron arriesgarse y entrar en acción.

De acuerdo a lo que pudo saber este diario, “tomaron los matafuegos y rompieron la puerta de entrada al departamento, con la intención de controlar el fuego”.

Poco después, ya con los brigadistas en la escena, la situación quedó bajo total control, sin riesgos para el resto de las propiedades y sus ocupantes.

De todas formas, atento lo ocurrido y, con todo el temor a cuestas, la mayoría de los vecinos, muchos de los cuales debieron abandonar los festejos por la llegada de 2024, ya estaban en la puerta del PH rezando para que todo terminara cuanto antes.

Algunos de ellos llegaron a expresar su temor de que algo parecido pudiera volver a suceder, ya que en la esquina de 19 y 39, a la 01.30, estaba previsto la quema de un momo de fin de año.

Como contrapartida, se supo que en La Plata y en la Provincia de Buenos Aires no se registraron heridos con quemaduras por el uso de pirotecnia.

Así lo confirmaron voceros del Ministerio de Salud bonaerense, que aseguraron que no hubo ingresos a unidades sanitarias por el uso de fuegos artificiales, algo que va de la mano con la disminución en la comercialización durante la previa.

Claramente se trata de una práctica a la baja en el consumo de pirotecnia para las fechas festivas, lo que lleva a que sean escasos o nulos los incidentes por su uso.

La cifra de este año fue celebrada por el área de Salud, considerando que lo que otros años era una verdadera problemática que ahora empieza a ser desterrada.

Ya en 2022 las estadísticas de lesionados con quemaduras por la manipulación de pirotecnia o, con ojos lastimados por los típicos corchazos, se redujeron de manera drástica en el territorio provincial.

 

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