Maradona: fallo judicial beneficia a dos acusados

Los médicos acusados por la muerte de Diego Maradona, Leopoldo Luciano Luque y Agustina Cosachov, fueron sobreseídos luego de que el juez Diego Martínez consideró prescripta un parte de la imputación en su contra.

De acuerdo a lo que pudo saberse de fuentes judiciales, se trata de los cargos por falsificación de documentos. El primer señalado fue el neurocirujano, al solicitar a la clínica Olivos la historia clínica con una firma falsificada de Maradona.

Mientras que a la psiquiatra se la acusaba de falsificar un certificado médico, donde expresaba que el ex DT de Gimnasia y Esgrima La Plata estaba “orientado y lúcido”.

“Siendo la prescripción una de las causas de extinción de la acción penal, corresponde declarar extinguida al acción penal en la presente causa respecto de los delitos de uso de documento privado falso para el caso de Leopoldo Luciano Luque, y de falsedad de certificado médico para el caso de Agustina Cosachov, toda vez que la misma se encuentra prescripta”, señala el escrito redactado por el juez.

El caso, como se sabe, tiene a ocho imputados acusados del delito de homicidio con dolo eventual. Para la Justicia hay elementos que prueban que de algún modo son en parte responsables de la muerte del exjugador.

En estos momentos la causa apunta contra Leopoldo Luque, Agustina Cosachov, Carlos Ángel Díaz, Nancy Edith Forlini, Gisella Dahiana Madrid, Ricardo Omar Almirón, Mariano Perroni y Pedro Pablo Di Spagna.

El juicio oral tenía fecha prevista para el 4 de junio, pero se postergó para el próximo 1° de octubre, a las 9.30, ante el Tribunal Oral en lo Criminal III de San Isidro.

Sin embargo, Madrid, al menos hasta el momento, fue separada de ese grupo y para ella se espera la designación de una fecha para el inicio de un juicio por jurados, tal como pidieron sus abogados Martín de Alba y Adolfo Baqué.

Durante la etapa previa al debate, cabe recordar, los abogados de Luque, Cosachov y Díaz, se opusieron al pedido de las hijas de Diego Maradona de trasladar su cuerpo desde el cementerio de San Miguel a un mausoleo en Puerto Madero.