El Pincha frenó todas las operaciones de venta de jugadores

Edición Impresa

La secretaría técnica de Estudiantes tenía un solo y claro objetivo antes de fin de año: conseguir la renovación de contrato de Eduardo Domínguez. Ese fue el primer paso a dar y por ende todos los cañones apuntaron en esa dirección.

Por eso, como recién se está confirmando, se frenaron las campañas publicitarias de ofertas, sondeos y búsqueda de jugadores. Al menos hasta que se terminara de abrochar al entrenador no habría más operaciones y tiene lógica: por qué se buscaría un jugador si todavía el técnico no había dado el ok para continuar o si no se conoce su parecer para abordar el próximo año con múltiples competencias.

Está claro que Estudiantes va a vender un par de futbolistas. O tres, si es necesario. Tiene la necesidad de equilibrar sus finanzas y eso lo saben los dirigentes y también el propio Eduardo Domínguez.

Pero una cosa es el número de dos o tres y otra es saber quiénes serán. Ver y planificar qué es lo mejor, analizar las ofertas y sentarse a negociar. Por eso la necesidad de cerrar las operaciones lo antes posible porque el 7 de enero el plantel estará en el Country para iniciar la pretemporada.

Santiago Ascacibar es quien podría marcharse, lo mismo que Tiago Palacios. Pero ya pegó primero Bahía con una oferta seductora por Román Gómez. Se viene una semana intensa porque hay que definir el futuro de Cristian Medina y también el de Edwuin Cetré, el jugador más valioso del plantel y determinante en los dos títulos recientes.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE