Culatazos, sangre y terror: en plena madrugada asaltaron a una familia

En la madrugada de ayer, una familia platense vivió momentos de extrema tensión cuando tres delincuentes armados irrumpieron en su domicilio, tras sorprender a su hijo en la puerta del garaje. El hecho ocurrió en la calle 27 entre 68 y 69, alrededor de las 03.00 de la mañana.

El joven regresaba de una reunión con amigos cuando, al abrir el portón automático para ingresar su automóvil, un Honda Fit, tres sujetos vestidos completamente de negro, con guantes y el rostro cubierto, se colaron en la vivienda antes de que el mecanismo de cierre se completara. Bajo amenaza de armas de fuego, obligaron al joven a dejarlos entrar y así tomaron por asalto la casa familiar.

Alertados por los ruidos, los padres del joven y su hermana adolescente despertaron y se encontraron con la dramática escena: los tres delincuentes sometiendo a su hijo. Sin mediar palabras, uno de ellos golpeó con la culata de un arma al padre, causándole un corte en el cuero cabelludo y varios hematomas en el rostro. Mientras uno de los asaltantes mantenía controlados a los cuatro miembros de la familia, los otros dos recorrían la vivienda en busca de dinero y objetos de valor.

Bajo amenazas constantes, los ladrones exigieron dinero en efectivo. La familia entregó un millón de pesos argentinos y 300 dólares, pero el botín no les pareció suficiente. Acto seguido, revolvieron todas las habitaciones, sustrayendo además un televisor, una computadora de escritorio, cuatro teléfonos celulares, una billetera con documentación y tarjetas, y dos mochilas con pertenencias personales.

Luego de casi dos horas dentro de la casa, alrededor de las 05:00 de la mañana, los ladrones escaparon a bordo del Honda Fit y un BMW modelo 2010 de la familia. Antes de huir, les ordenaron a las víctimas permanecer en el baño del piso superior por diez minutos más. Una vez transcurrido ese tiempo, la familia logró llamar al 911. Una ambulancia del SAME se hizo presente y trasladó al padre de familia al hospital San Juan de Dios, donde recibió atención por las heridas sufridas en la cabeza.

En cuanto a la investigación, los primeros indicios sugieren que se trató de un robo al voleo, aunque los investigadores han descartado la posibilidad de que los delincuentes fueran improvisados. Por el contrario, todo apunta a que se trata de un grupo delictivo bien organizado, con posibles conexiones tanto en la ciudad como en el Conurbano bonaerense.