La inflación se enfría por el freno en los alimentos

La inflación volvió a mostrar señales de desaceleración en mayo, impulsada principalmente por la evolución favorable del rubro alimentos y bebidas. Mientras se aguarda el dato oficial del INDEC, que se conocerá el próximo jueves 13, distintas consultoras privadas ya anticiparon que la suba del Índice de Precios al Consumidor (IPC) habría quedado por debajo del 2%, y que esa tendencia se consolidaría en junio.

Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que elabora el Banco Central, el aumento de precios en mayo fue del 2,1%, pero algunas estimaciones privadas arrojaron incluso cifras más bajas. El mismo informe proyecta que la inflación de junio podría perforar el umbral del 2% por primera vez en cinco años.

En el caso de la consultora LCG, que realiza un seguimiento semanal de alimentos y bebidas, el resultado acumulado de las últimas cuatro semanas de mayo mostró un alza de solo 0,1%. La última semana del mes cerró con una suba del 0,2%, mientras que la anterior había registrado 2,1%. Entre los rubros con precios en baja se destacaron verduras (-6,8%), comidas listas para llevar (-1,3%), carnes (-0,6%), frutas (-0,4%) y productos lácteos y huevos (-0,2%). En contraste, bebidas e infusiones subieron 5,2%.

Econviews también detectó una fuerte moderación. En el Gran Buenos Aires, la suba semanal en alimentos y bebidas fue de 0,9% en la cuarta semana de mayo, con un acumulado mensual de apenas 0,5%. Dentro de esa canasta, solo la verdulería registró una suba significativa (4,8%), lo que sugiere estabilidad o leves bajas en el resto de los productos.

La consultora Equilibra señaló un incremento del 1,5% en alimentos y bebidas no alcohólicas, y de 0,8% en bebidas alcohólicas y tabaco. Este comportamiento ayudó a que su estimación de inflación general se ubicara en 2%.

Desde C&T Asesores Económicos informaron una suba del 0,4% en alimentos y bebidas en mayo, en una inflación general del 1,8%, la más baja desde mayo de 2020. Según su análisis, el alivio en los precios estuvo vinculado con mejoras logísticas derivadas de menores lluvias, además de cierta estabilidad macroeconómica.

En sintonía, la Fundación Libertad y Progreso también calculó una inflación del 1,8%, la más baja desde 2017 fuera del contexto de pandemia. El informe destacó la estabilidad cambiaria y la consolidación fiscal como factores que ayudaron a contener los precios, aunque no desagregó datos específicos del rubro alimentos.

Eco Go estimó una inflación del 2% en mayo, a pesar de subas puntuales como el aumento del boleto de colectivo del AMBA o la leve corrección en combustibles. El elemento que compensó esos ajustes fue la contención en alimentos, que mostraron un alza inferior a la proyectada.