Corazón y fútbol para ganar un partido emocionante

Por MARTIN CABRERA
COMENTARIO

Estudiantes se debía un partido así en el torneo. Necesitaba mostrar sus dientes, porque a pesar de llegar puntero e invicto su juego no contagiaba. Ayer no jugó de maravilla, pero tuvo rebeldía y corazón para ganarle 3-2 a Rosario Central, un rival de jerarquía que bien sirve para darle un contexto a los tres puntos.

El equipo de Nelson Vivas fue un justo ganador. A pesar de que los flashes y las cámaras se hayan ido detrás de los reclamos visitantes sobre Diego Abal, no debería discutirse el triunfo.

En el primer tiempo Estudiantes intentó manejar la pelota y buscar, con tranquilidad, llegar hasta el arco de Sebastián Sosa. Ni siquiera al quedar en desventaja a los 22 minutos, en el primer remate al arco de Central, se desvió de su objetivo.

Ese gol le dio más vida. Con las corridas de Tití Rodríguez por izquierda y la recuperación de Israel Damonte y Santiago Ascacibar en el medio, empezó a marcar diferencias. Primero, a los 28 minutos, llegó el empate de Damonte. Córner desde la izquierda, salió mal el arquero y en la segunda jugada, de cabeza, llegó el empate. Clave. El segundo gol lo marcó Lucas Viatri diez minutos después, y tras convertir un claro penal por la mano de Esteban Burgos.

Estudiantes se lo llevó por delante. En ese tramo final mostró la agresividad que le estaba faltando y hasta pudo estirar la ventaja pero primero de cabeza y luego con un derechazo, Lucas Viatri no lo logró.

El segundo tiempo fue para el infarto. Pasó de todo. De arranque Chacho Coudet movió el banco: adentro Germán Herrera y Gustavo Colman. El primero de ellos le dio más movilidad y peligrosidad a la delantera rival, que cuando atacó con pelota dominada lastimó mucho.

De todos modos el partido parecía estar controlado por Estudiantes. Losada no participaba del juego hasta que un pelotazo cruzado (también puede decirse una genialidad de Martínez) encontró mal parado a Leandro Desábato, que no llegó a despejar la pelota. Marco Ruben la dominó, se acomodó, giró y ante la duda del arquero encontró el espacio para llegar al gol al pegarle fuerte al primer palo. Iban 7 minutos y el partido pareció complicarse otra vez para Estudiantes.

Pero como en el primer tiempo, el Pincha tuvo esa cuota de carácter para sobreponerse. Un ataque iniciado por Damonte en el medio y con Solari por la banda derecha terminó en córner, del cual llegó el gol de Facundo Sánchez. El defensor se aprovechó de otro error de Sosa (se quedó estático debajo del arco) para llevarse casi de prepo la pelota. Gol y otra vez arriba en el marcador con más de media hora por jugarse.

Lo que vino después fue frenético. Lo buscó Central con sus armas y lo contragolpeó Estudiantes. Fue un mano a mano muy interesante hasta que llegó lo inevitable: la expulsión de Giovani Lo Celso. El “10” de Central es un gran jugador, pero todavía le falta para ser crack. Quiso adueñarse de la pelota con su juego y con la palabra. Habló y se quejó durante todo el tiempo que estuvo en cancha. Estando amonestado le cometió falta a Schunke y Diego Abal lo expulsó correctamente. Su bronca, claro, es que se perderá el clásico de la próxima fecha contra Newell’s.

UN FINAL POLEMICO Y CALIENTE

Con diez jugadores la visita siguió igual pero dejó espacios en defensa. Gabriel Graciani tuvo dos mano a mano que despilfarró de manera increíble. Contestó Central con remate cruzado de Herrera que Losada mandó al córner y con un mano a mano de Marco Ruben que no fue gol por esas cosas del fútbol (para algunos plateístas la pelota había entrado).

La última jugada fue lo que le faltaba al partido. Julián Marchioni se llevó la pelota por delante y habilitó a Ruben, que ante el contacto se tiró al piso. A primera vista pareció penal. Luego la repetición le dio la derecha al árbitro y a su asistente: no fue penal porque el jugador de Estudiantes ni siquiera lo tocó.

Final del partido. Ganó Estudiantes para seguir como líder del torneo, cinco puntos por delante del pelotón de escoltas (algunos juegan hoy). Buen momento para un equipo que no brilla y sufre por sus lesionados, pero sigue invicto en lo más alto de la tabla. Ayer mostró carácter y por momentos buenas intenciones. Suficiente para seguir como puntero.