No importa día, hora, ni lugar
| 18 de Agosto de 2016 | 00:47
Especial
SAN JUAN
E l amor por los colores, por un Club, por la camiseta, motiva al hincha a que todo es posible. No importa que sea un día laborable, de noche, a mitad de semana y a casi mil quinientos kilómetros de la Ciudad. “Hola Basurero, acá está de nuevo, te saluda la Banda de Fierro” , canta el Triperío en el Estadio “San Juan del Bicentenario”. En la previa algunos lo pasaron mejor que otros.
Los que viajaron ayer mismo temprano en avión o llegaron en auto, no tuvieron problemas y hasta se dieron una vuelta por el Hotel Provincial donde se sacaron fotos con los jugadores.
Pero los que fueron en ómnibus y habían salido durante la madrugada arribaron para ir directamente al partido. Es que tuvieron que soportar que la Policía los escoltara desde 200 kilómetros antes de llegar a San Juan hasta el Estadio, a paso de hombre. Por eso algunos micros tardaron varias horas y recién pudieron llegar una hora antes del juego. Algo bochornoso.
Después el hincha hizo su fiesta, poniéndole color con camisetas, gorros, bombos, trompetas y banderas en una de las cabeceras, para donde atacó el Lobo en el primer tiempo. Es por ello que disfrutaron del gol de Vegetti a los 21 minutos. Enseguida el “dale Lobo y dale Lobo” , se escuchó más fuerte que nunca en la noche sanjuanina.
Pero a esta altura ya no sorprende la respuesta de la gente del Lobo por que en otras ediciones de la Copa Argentina también ha estado presente desafiando distancias. En la primera edición en San Juan (en ese mismo Estadio) a fines de 2011; en Catamarca en 2012; ó dos veces en Misiones y luego en Córdoba, el año pasado.
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