La seguridad en las vías, otro eje del reclamo en la estación Pereyra

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Si bien la falta de los andenes a nivel es el principal reclamo de los usuarios del ramal Roca en Hudson y Pereyra, está lejos de ser el único. Sobretodo en la última de esas estaciones, ayer los manifestantes pusieron especial énfasis en la falta de medidas de seguridad para recibir la llegada de los nuevos coches. “Hay un alto riesgo de que se produzca un accidente grave. Es la vida de los chicos la que está en juego”, describió un padre que ayer participaba de la protesta en la estación Pereyra.

Situada a escasos metros del colegio María Teresa, la estación suele estar colmada de chicos que cruzan constantemente las vías para acudir al establecimiento educativo emplazado en el corazón del parque. La comunidad educativa está reclamando que construyan un puente peatonal. Apuntan que si con los viejos trenes diésel el riesgo ya era significativo, con los nuevas formaciones eléctricas el peligro es mayúsculo. “Son más silenciosos y van a pasar a una frecuencia mayor”, remarcan.

Por otro lado, piden vallados preventivos en algunos sectores para evitar accidentes. “Se trata de una zona de mucho ganado mayor que podría atravesarse en las vías”, advierten.

Por último, apuntaron que las calles de las inmediaciones resultaron destruidas por los micros que reemplazan al tren. Y que si hoy se puede -al menos- circular, es porque los propios vecinos, padres de alumnos y productores de la zona se encargaron de arreglarlas “tirando toscas” durante toda una jornada de trabajo.

 

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