“El puente azul”: un viaje teatral hacia la aventura de amar a la distancia

Dice su director, Emiliano Dionisi, el mismo que rompió la taquilla del off porteño con el potente musical de bolsillo “Los Monstruos”, que “El puente azul”, la obra que llegará esta noche por primera vez a la Ciudad, es un “pequeño tesoro”, una “historia pequeña, deliciosa, profunda e intensa” que permite volver a conectar con los sentidos más primitivos “en esta época de tanto ruido, y de tanto impacto”: una historia de amor y de distancia contada con música y canciones.

Estrenada el año pasado, y con dos temporadas de funciones en la que ha cosechado premios y nominaciones por doquier, se trata de un texto de Fernando Albinarrate, el autor de la aclamada pieza “Ni con perros ni con chicos”, que nació tras una idea de Mariano Mazzei (uno de los protagonistas), quien con nostalgia le mostró unas cartas que sus abuelos inmigrantes se habían enviado años y años atrás, un material que lo emocionaba.

“Es una pieza que desde que la leí me pareció hermosa porque trata con mucha sensibilidad y mucha sencillez el tema de las distancias. Porque no es solamente para quien tenga raíces o abuelos en otros continentes, sino también para todos aquellos que hayan tenido cualquier tipo de relación a la distancia, una de las cosas más difíciles para abordar en alguna relación, cualquiera sea, familiar, sentimental, emocional”, asegura Dionisi en diálogo con EL DIA.

Puentes emocionales

A su entender, la obra, y de ahí su nombre, “trata también sobre puentes, sobre la idea de cómo establecer esos puentes para que la comunicación siga y para ver si el amor y las relaciones son posibles con la distancia en metros, kilómetros de por medio”.

Dolores Ocampo complementa en escena a Mariano Mazzei, quienes, a su vez, están acompañados por los músicos Matías Fernández y Nicolás Reboredo, pianista y violinista que, según Dionisi, “aportan un marco hermoso” para que la magia del teatro suceda.

“Los dos actores, que cantan todo el tiempo a flor de piel, transitan distintos personajes. Cuentan la historia de dos inmigrantes del principio del siglo pasado y de dos chicos más jóvenes en la actualidad, que también se ven forzados a quererse a la distancia”, dice el joven director y dramaturgo, quien agrega que “ese paralelismo entre los tiempos y las distancias generan un viaje teatral”, que es lo que hace aún más “emocionante” el material.

Sobre este proyecto, que lleva adelante de la mano de su Compañía Criolla, Dionisi revela que significó también un desafío profesional para él porque se trata del primer material de otro que dirige, una experiencia que analiza como positiva y “fascinante”. “Me gustó tomar las palabras de otro y llevarlas a escena”, dice.

Sobre la estética de su trabajo, sostiene que se trata de una “puesta absolutamente despojada porque sentimos que no nos hacía falta nada para contar. Lo que cuentan son las palabras, en las cartas, en las llamadas, en los mensajes. Palabras cantadas o habladas que transmiten emociones que van desdoblando los personajes”.

Entusiasmado con el estreno en nuestra ciudad, que tendrá una función esta noche y otra el sábado 10 de noviembre, ambas desde las 21, en Teatro Estudio, 3 entre 39 y 40, Dionisi anticipa que los espectadores cruzarán puentes emocionales de los más diversos, “desde nostalgia, amor y alegría también, porque los reencuentros y las promesas también son alegría y diversión”.