Andújar no pudo conservar una valla invicta, que llegó a cumplir 567 minutos sin caídas

Ramiro Paz, a los 78 minutos del partido en el cual el Pincha había empatado 2 a 2 ante Banfield en la primera fase de la Copa de la Liga Profesional pasada, había sido el último futbolista que había batido a Mariano Andújar. Hasta ayer.

Es que durante el compromiso de anoche ante Independiente, el defensor Juan Manuel Insaurralde le cortó la racha con un buen cabezazo a colocar a los 15 minutos del primer tiempo.

El arquero salió mal en la jugada previa al gol y en el posterior centro de Velasco, que se fue cerrando y picó en el área chica, y el zaguero terminó rompiéndole una racha de 567 minutos sin recibir goles.

Cabe destacar que la racha de Andújar no era la misma que la de Estudiantes, ya que el Pincha había perdido por 2 a 0 contra Argentinos Juniors en la última fecha de la primera fase del certamen anterior.

En ese momento, Fausto Vera y Emanuel Herrera le habían marcado a Gerónimo Pourtau, ya que el entrenador Ricardo Zielinski había optado por cuidar a la mayoría de los titulares de cara a la fase definitoria.

EL ROJO, EL VERDUGO

Es así que Andújar, después de aquel empate que padeció contra el Taladro luego de estar arriba por 2 a 0, selló su arco durante seis partidos, de los cuales el equipo ganó cuatro y empató dos.

El León venció a Aldosivi en UNO por 1 a 0 con gol de Martín Cauteruccio sobre la hora, después empató 0 a 0 en el Clásico contra Gimnasia también en 57 y 1, y derrotó por la mínima a Rosario Central en el Gigante de Arroyito con un nuevo gol del delantero uruguayo que hoy juega en el Tiburón marplatense. Más tarde, por la fecha 12, recibiría a Platense en el estadio Jorge Luis Hirschi y lo despacharía con un triunfo por 2 a 0 con anotaciones de Lucas Rodríguez y Fabián Noguera.

Ya tras la mencionada derrota contra el Bicho en La Paternal, llegaría la fase definitoria del torneo y el equipo caería por penales luego de un empate sin goles en condición de local.

Justamente, esa eliminación se había producido ante el verdugo de anoche. El Rojo de Avellaneda, luego de un partido chato, dejó al León sin chances de avanzar en el certamen anterior a través de un triunfo por penales.

Ayer en un partido muy diferente, en el cual los equipos se animaron a jugar más que en la ocasión anterior, el arquero no tuvo una buena actuación y terminó resignando el invicto.