Errores en el juego aéreo le quitaron todo: ganaba 2 -1 y Estudiantes terminó perdiendo 3 a 2 ante Banfield

Martín Mendinueta

Mareado por los cambios que hizo pensando en el partido copero del miércoles y por fallas evidentes en el juego aéreo defensivo, Estudiantes, que ganaba cómodo 2 a 0, terminó perdiendo 3 a 2 ante Banfield como visitante. Eduardo Domínguez empezó temprano a dosificar el desgaste físico de su algunos, hizo modificaciones y terminó extraviando la identidad que lo estaba haciendo ganar. El Taladro reaccionó sacando diferencias por arriba en el área albirroja y logró lo que parecía imposible. Lo dio vuelta para quedarse con un triunfo 3 a 2 que le permitió eludir las duras críticas que le venían haciendo sus hinchas. Estudiantes sufrió con los cambios y, especialmente, con la salida de Mikel Amondarain, que hizo un buen partido.

Con mucho recambio respecto de la formación que ganó en Paraguay por la Copa Libertadores, Estudiantes salió a buscar un buen resultado en el estadio Florencio Sola ante Banfield.

Luego de un comienzo equilibrado, con pocas aproximaciones sobre los arcos, Estudiantes se puso en ventaja a los 20 minutos gracias a un zurdazo bajo y cruzado de Santiago Arzamendia que se coló junto al palo izquierdo.

Banfield respondió dos minutos más tarde con un buen derechazo bajo de Auzmendi, que pasó cerca del palo derecho de Muslera.

Estudiantes, bien plantado gracias a su manejo del balón en el medio, generó peligro a los 31 minutos mediante un disparo de Facundo Farías desde afuera del área.

A los 36 minutos, Leonardo Suárez reemplazó al lesionado Fabricio Pérez, quien recibió un golpe y no estaba en condiciones de continuar.

A los 43 minutos, luego de una gran jugada colectiva de Estudiantes, fue Facundo Farías quien le dio una asistencia exquisita a Román Gómez, quien definió con un remate rasante y por debajo de la salida del arquero Facundo Sanguinetti.

Luego de un primer tiempo parejo, Estudiantes se valió de algunos destellos de su jerarquía para sacar ventaja e irse al descanso imponiéndose por 2 a 0. Los únicos goles llegaron gracias a un zurdazo bajo, potente y preciso de Santiago Arzamendia que se coló junto al palo derecho de un impotente Snguinetti. Luego, en el ocaso de la primera etapa, Román Gómez en una trepada por la derecha, definió por debajo ante la salida del arquero del Taladro.

Para salir a jugar la segunda parte del partido, Eduardo Domínguez decidió mandar a la cancha Gonzalo Piovi en lugar de Santiago Ascacibar, con el objetivo de preservar al capitán del Pincha de cara al choque de vuelta ante Cerro Porteño, por los octavos de final de la Copa Libertadores del próximo miércoles.

En el comienzo del complemento, precisamente a los 8, Rodrigo Auzmendi llegó a puntear un envío al área que llegó a rozar el ex Estudiantes Mauro Méndez. El Pincha salió dormido al segundo tiempo, se mantenía expectante ante los movimientos del Taladro y casi no ofreció resistencia al ataque del conjunto local. 

Tras el descuento de Auzmendi, Domínguez mandó a la cancha a Ramiro Funes Mori y a Edwuin Cetré en lugar de José Sosa y Facundo Farías. 

A los 15 minutos, tras un doble cabezazo en el área, Banfield alcanzó la igualdad en su casa. Luego de que Auzmendi bajó un córner desde la derecha, Río aprovechó la permeabilidad de la defensa Pincha y marcó el empate.

Tan solo un minuto más tarde, Banfield aprovechó que Estudiantes seguía golpeado por el empate y en un nuevo envío al corazón del área, el atacante Frank Castañeda entró en soledad ál área y clavó un cabezazo a quemarropa que dejó desarmado a Fernando Muslera.

A los 22 minutos, cuando Estudiantes buscaba recuperarse del cimbronazo que tuvo en el arranque del complemento, Mikel Amondarain quedó frente al arco a metros del área y sacó un fuerte remate que se estrelló en el poste derecho de Sanguinetti. Tras ello, el juvenil fue reemplazado por Lucas Cornejo.

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Banfield

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