En el Bernabéu, River sólo habló el idioma de la felicidad

El pitazo final del uruguayo Cunha desató el festejo interminable en la fría noche madrileña de los miles de hinchas de River que vivieron la consagración histórica en la última Copa Libertadores de la historia que tuvo una final con partidos de ida y vuelta.

Y la felicidad fue el denominador común en cualquier voz relacionada con el club de Nuñez que se expresó; tal como lo hizo el mánager de la Institución Enzo Francescoli (campeón de la Copa en el ´96): “Este grupo emociona, por la responsabilidad que tienen para con el club, por como trabajan. La capacidad del cuerpo técnico para llevar su idea en un club que justamente respeta muchísimo las formas”. A lo que agregó: “Fue una final durísima como lo son todos los clásicos; por suerte pudimos terminar esta final de locura con 40 días; pata todos esto fue muy duro, por suerte se volcó paras River, estamos muy felices por lo que se logró. Gallardo es mi amigo, pero ha demostrado con seriedad que es de los más grandes en la historia del club; es un momento para disfrutar”, finalizó el uruguayo.

“NO SE PUEDE EXPLICAR ESTO”

Entre tantas voces exaltadas en el Millonario, se destacó la de Gonzalo Martínez, autor del tercer gol que aseguró la Copa: “No se puede explicar esto, te pasan muchas cosas por la cabeza, voy a extrañar mucho a River”, aclaró el Pity adelantando su partida de Nuñez, casi con seguridad a la MLS de Estados Unidos.

“Voy a jugar el Mundial de clubes pero después de enero, no voy a seguir, ahora quiero festejar con la gente, los compañeros y la familia; somos conscientes que en Argentina y todo el mundo hay gente contante por River”, dijo por último el goleados del Millo.

Otro de los que habló fue el autor del segundo gol, el crack colombiano Juan Fernando Quintero: “Fue muy difícil lograr esto, Boca es un gran equipo, pero sabíamos que si lo trabajábamos, lo podíamos ganar, somos justos y campeones; en el gol busqué el espacio, controlé y le pegué”, declaró el colombiano.

Para lo último quedó lo que dijo Rodolfo D´Onofrio, el presidente de River: “Hay que respetar al rival siempre, esto fue dedicado a los 66.000 hinchas de River que no pudieron verlo en nuestra cancha. Argentina tiene que ser una fiesta yen loa que todos nos respetemos”, finalizó.