Cómo ayudarlos a adaptarse al mundo que les tocó

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Prestar atención a las necesidades de los niños, hablar con ellos, promover el jugo, mantener rutinas domésticas y fomentar el contacto con amigos y familiares a través de video llamadas son algunas de las recomendaciones de pediatras, psicólogos y psicopedagogos para ayudar a los pandemials a enfrentarse al mundo que nos toca vivir.

Con respecto a hablar con los niños sobre la pandemia, lo que se recomienda es hacerlo en un lenguaje que puedan entender y no dar más información de la que piden. Comunicarse con ellos en tono confiado y asegurarles que la situación es transitoria resulta tan importante como no exponerlos a noticieros televisivos y tratar de planificar actividades en el hogar y al aire libre durante que les ofrezcan la seguridad de lo que se puede prever.

Dado que los niños aprenden a través de observación y la imitación, una buena forma de ayudarlos a que el contexto pandémico no los estrese es que los adultos a cargo también eviten en su presencia los gritos, las peleas o mostrarse desbordados por la situación.

Otra recomendación frecuente es aprovechar el poder terapéutico del juego promoviéndolo y participando de él. Además de constituir una necesidad biológica de los niños, el juego es para ellos un medio para comprender la realidad y aprender. Cuando los niños juegan no solo aprenden sino que canalizan emociones que les hacen mal.

Algunos expertos sugieren también empezar a exponerlos gradualmente al mundo exterior: ir a hacer los mandados con ellos con las medidas de precauciones correspondientes para que vean gente y conozcan otros entornos, y tratar de recuperar también, en la medida que las condiciones sanitarias lo permiten, cierto contacto familiar.

En cualquier caso, la clave para ayudarlos es tenerles paciencia. Ningún niño puede desaprender en unas semanas conductas aprendidas a lo largo de más de un año de encierro y estrés.

 

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