¡Quién lo hubiera dicho! Pipo reseteó al Lobo y lo hizo mejor

Por MARTÍN MENDINUETA

@firmamendinueta

Cuando lo fueron a buscar, después de haber cesanteado a la dupla Messera-Martini, la mención de su apellido generó una aceptación mínima. No más del treinta por ciento de los triperos creían que había sido una buena elección.

Muy porteño. Uno criado en River que se hizo ídolo en San Lorenzo. “No sabe dónde queda Estancia Chica”. “Viene porque nadie lo llama; será otra ave de paso. Él quiere dirigir a un equipo de Buenos Aires”.

Gimnasia, que derrotó sólo uno a cero a este triste Ciclón por la muy buena actuación de su veterano arquero, le ratificó a la multitud tan entusiasmada que va por el buen camino. Puede parecer un concepto light, pero no lo es. Esta formación, que empieza en la solidez de Rodrigo Rey, se apoya en la enorme relevancia de Alemán y sueña con la velocidad de Carbonero (ayer no mostró su mejor versión), está perfilada como para ir en busca de metas seductoras.

SE IMPUSO CON AUTORIDAD Y CLARA SUPERIORIDAD EN TODAS LAS LÍNEAS

Sin sobresaltos. Sin sufrimiento. Sin que brote la necesidad de mirar el reloj a cada rato. El Lobo sintió en todo momento que tenía apretado el triunfo en uno de sus puños y no se le podía escapar. Así fue. A partir de rendimientos parejos, la superioridad del dueño de casa se convirtió en monólogo. Troglio, después de haber recibido el afecto que conquistó en buena ley, fue testigo de una actuación muy pobre de sus dirigidos.

Con otra camiseta, nadie hubiera dicho que el visitante era uno de los grandes del fútbol nacional.

Que el pleito se haya resuelto por un solo gol diferencia oculta las apreciables diferencias que existieron entre vencedor y vencido.

INSAURRALDE APROVECHÓ EL TURNO RINDIENDO COMO PARA QUEDARSE

Entre las más valiosas conclusiones se destaca la buena complementación de los mediocampìstas de corte defensivo. Cecchini estuvo entre las figuras e Insaurralde, sin brillar, no falló. Su despliegue se hizo notar, dejando la impresión de que no será necesario volver a retocar la franja central.

Gerometta, siempre bancado por el DT, es un punto flaco que debe “engordar” su prestación. Todo parece indicar que Weigandt no regresará. Igualmente, el marcador lateral derecho titular tiene que seguir puliendo su relación con la pelota.

El aplomo que ha ido consiguiendo Fratta tuvo su origen en la confianza brindada por Pipo. Haber desarmado la pareja de zagueros centrales Morales-Guiffrey fue una apuesta tan impactante como riesgosa. Dejó de escucharse la sentencia “el uruguayo no puede jugar”. Y, al mismo tiempo, Germán Guiffrey viene cumpliendo con elogiable sobriedad en el puesto que ¿es o era? de Matías Melluso.

Gorosito le hizo bien a Gimnasia. Lo reseteó consiguiendo una versión convincente.