En un partido de locos, Boca pagó muy caro los errores de su defensa en Córdoba

Partidazo en el Gigante del barrio Alberdi, de Córdoba, con un electrizante 4-3 a favor de Belgrano, que sigue invicto y saltó a la punta de la Zona B de la Copa de la Liga, sobre Boca, el finalista de la Copa Libertadores de América que en el torneo local está cada vez más relegado, con cinco derrotas en ocho presentaciones.

En un juego de arco a arco, desde que la pelota comenzó a rodar, el Pirata sacó ventaja y los Xeneizes lo dieron vuelta rápidamente, pero su defensa cometió tantos errores que terminó el primer tiempo 4-2 abajo, y aunque achicó la diferencia a poco de empezar la etapa complementaria no pudo evitar una nueva derrota.

Nada de estudiarse, empezaron con todo. Los dos. Primero llegó a fondo Boca, con Barco por la izquierda. La respuesta de Belgrano no se hizo esperar, y aprovechando una equivocación de Campuzano, Ulises Sánchez le pegó desde afuera y Passerini, tras el rebote otorgado por Javier García, gritó el 1-0 que festejó trepándose al alambrado como sueña Cavani hacerlo en algún momento con la hinchada Xeneize.

La apertura no calmó las buenas intenciones, y aunque las réplicas del local ofrecían sensaciones más sólidas, Boca asustó con una entrada de Barco en posición de número “9”, que tapó el arquero, y alcanzó la igualdad cuando Merentiel se filtró por la derecha para recibir un pase de Blondel, y el centro cruzado por el uruguayo fue aprovechado por Benedetto, quien conectó entrando por detrás de Rébola.

Entretenido, verdaderamente, con ataques cruzados que se sucedieron. Probó de nuevo Sánchez, y complicó al arquero, que no pudo retener, y antes de completarse la primera media hora, Benedetto se vistió de asistidor, para darle luz verde a una corrida de Saracchi que el marcador continuó con un pase bajo para la entrada de Merentiel, que estampó el 2-1.

Benedetto, luego de recibir de Blondel, colocó la pelota por sobre el arquero, y el travesaño le negó el tercero de los Xeneizes, y Pipa volvió a ser protagonista central cuando sin intención desvió un cabezazo de Barinaga, quien conectó con un golpe de cabeza un tiro de esquina lanzado por Sánchez, desde la derecha.

No fue todo, porque Marín sacó provecho de un mal control de Valentini y dejó en posición de gol a Passerini, el atacante que llegó al Pirata para reemplazar a Pablo Vegetti y de zurda estableció el 3-2, y enseguida Rolón, el ex Boca, aumentó luego otro córner desde la derecha.

Merentiel, asistido por Zeballos, quien rápidamente salió lesionado, puso a Boca a un gol del empate con mucho camino por recorrer, y en el marco de un encuentro que no perdió intensidad, con ataques cruzados que pudieron modificar el 4-3, llegaron al final de un verdadero festival de goles.