Estudiantes construyó la victoria de atrás para adelante y aprovechó el hombre de más

En ataque golpeó en el momento justo con la pelota parada, pero en el segundo tiempo no pudo marcar otro gol para liquidarlo antes

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Por LAUTARO SEGURA

lsegura@eldia.com

Para entender el triunfo de Estudiantes en el clásico platense número 160 hay que analizar varios puntos pero, uno de los más importantes, fue el orden defensivo. Pablo Quatrocchi armó una línea de cuatro que le respondió muy bien y que no sufrió demasiado, especialmente cuando Gimnasia se quedó con un hombre menos y perdió peso en ofensiva. Arriba le costó finalizar las jugadas, pero golpeó en el momento justo a través de la pelota parada.

Durante la semana el entrenador interino jugó al misterio y no reveló el equipo hasta minutos antes de que comience el partido a pesar de que lo tenía definido hace varios días. Armó un 4-2-3-1 que fue mutando dependiendo las circunstancias del juego. Los tres cambios que realizó fueron nombre y nombre y sacó a jugadores que estaban tocados físicamente.

En el fondo Jonatan Schunke y Gonzalo Jara redondearon un buen encuentro y solamente dudaron una sola vez, en el primer tiempo, cuando Faravelli se les filtró por el medio. Después sufrieron poco y anularon a los atacantes albiazules, especialmente a Santiago Silva, quien no pudo imponer su experiencia en el clásico.

Los laterales también tuvieron una buena actuación: Facundo Sánchez se se mostró bien parado atrás y en ataque fue una complicación para la visita, especialmente en los primeros 45 minutos; Facundo Mura, que debutó en la Primera y con el perfil cambiado, estuvo firme a la hora de marcar y hasta se animó a pasar en varios pasajes. En el complemento se quedó sin resto desde lo físico y Quatrocchi puso en cancha a Juan Ignacio Díaz para los últimos minutos.

La dupla compuesta por Iván Gómez y Enzo Kalinski fue más que importante para ganar el mediocampo, especialmente cuando el Pincha tuvo un hombre de más por la expulsión. De los dos sin dudas el que más se destacó fue el categoría 1997, quien otra vez fue el mejor del equipo y no paró de correr hasta que Germán Delfino pitó el final. Fue clave su despliegue para la victoria.

La línea de cuatro que paró Pablo Quatrocchi le respondió de buena manera en el clásico

 

¿Y en ataque? El DT puso a Mariano Pavone como el hombre más adelantado y por atrás suyo jugaron Lucas Albertengo, Gastón Fernández y Manuel Castro. Estos tres últimos le respondieron con creces al entrenador y aportaron lo suyo en momento importantes.

El ex Independiente y Atlético de Rafaela exigió a los defensores y, obviamente, fue el autor del gol desmarcándose de buena manera de Gonzalo Piovi, su marca; la Gata aportó experiencia y cuando tuvo la pelota en los pies supo manejar los tiempos, además de lanzar el córner que terminó en gol; el uruguayo, en tanto, intentó en todo momento y no pudo destacarse más porque en muchos jugadas se terminó enredando solo.

Si bien le faltó más precisión en los últimos metros para generar más chances de gol y definir la historia antes, Estudiantes no sufrió demasiado en los minutos finales y terminó justificando la victoria en el clásico. El ingreso de Carlo Lattanzio por Pavone le dio frescura al ataque (el juvenil casi marca un golazo), mientras que de Mateo Retegui poco y nada se puede decir ya que al minuto de entrar se fue expulsado.

Quatrocchi termina su interinato en Estudiantes habiendo cumplido, especialmente ayer ante Gimnasia. Planteo el partido de buena manera, los jugadores le respondieron y la gente festejó un nuevo triunfo en el clásico por 1-0.

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