“Recibo el mismo castigo que un chorro”

Los playones municipales y depósitos policiales suelen verse plagados de motos abandonadas.

La explicación es que, a las que fueron decomisadas por ser robadas, se les suman las que pertenecían a sus legítimos dueños y terminaron incautadas por alguna infracción de tránsito.

El cálculo que hizo Jorge, a quien le sacaron su Gilera Smash tras un operativo en Gonnet, clarifica la cuestión: “Si me la sacaban un viernes, a la multa por no tener casco se le suma el acarreo y los días de estadía en el playón. Todo eso es un montón de plata en efectivo que un laburante no tiene en el momento. Entonces, me es más sencillo comprarme otra usada”, sentenció.

Lo subyacente a su testimonio es la sensación de inequidad: “Si me paran y no tengo la cédula verde original -anda con una fotocopia por si lo asaltan- recibo el mismo castigo que un ‘chorro’ que recién se robó una”, expresó Jorge.