Muerte de Daiana Abregú en comisaría de Laprida: un mensaje de una de las policías detenidas

El caso de Daiana Abregú, detenida el 4 de junio y encontrada muerta en una celda al día siguiente, tiene nuevos avances que complican a los policías detenidos. En las últimas horas, un audio complicó a los sospechosos. 

La causa que tuvo lugar en una comisaría de Laprida tiene a tres mujeres y dos hombres que pertenecen a la fuerza de seguridad detenidos. Vanesa Nuñez, la encargada de la seguridad de la joven fallecida, es la autora del audio que apareció y la más complicada. 

Vale mencionar que en la primera autopsia se informó que se trataba de un suicidio. Abregú había sido llevada a la dependencia por un supuesto estado de ebriedad y horas más tarde apareció colgada en su celda con su campera de jean. 

Pero una segunda autopsia descartó que ella se haya quitado la vida, por lo que se cambió de carátula a “homicidio doblemente agravado por su comisión con alevosía y por tratarse de miembros de la fuerza de seguridad policial en abuso de sus funciones”. 

El fiscal a cargo, Juan Ignacio Calonge, adelantó que la investigación está “encaminada”. Los dos policías hombres fueron detenidos en la comisaría de Azul mientras que las tres policías quedaron en Olavarría. 

Vanesa Nuñez está más complicada que sus compañeros puesto que era ella la encargada de cuidar de la detenida y la que la encontró sin vida. Se conocieron al menos cuatro audios que envió ese día, en el que en uno de ellos se refiere a que “la tengo presa a Abregú”. 

Sin embargo, fueron borrados y se intenta recuperar el resto. Según declaró, eliminó cuatro audios de Whatsapp (dos a su pareja y dos a sus amigas) porque “no quería tener nada de ese día”. 

Una de las líneas de investigación -aunque no ha sido confirmada- es que la pareja de Nuñez la habría engañado con la joven detenida. Frente a las autoridades judiciales, la efectivo afirmó que intentó reanimarla durante quince minutos hasta que llegó la ambulancia.

Por otro lado,detalló que el domingo 5 de junio comenzó su turno en la comisaría de Laprida a las 13 hs como “servicio de imaginaria y tenía como tarea principal hacerse responsable de “todo lo que ocurre dentro de la celda y estar pendiente de las necesidades de la detenida”. 

Un detalle que complica su situación judicial es que aseguró no haber escrito el acta aunque, al leerlo, las autoridades observaron que había sido falsificado ya que comienza “Quien suscribe, Vanesa Nuñez…”