El retiro presidencial en El Calafate, matizado con la política santacruceña

El Calafate.-El presidente Néstor Kirchner y la mandataria electa Cristina Fernández recibieron ayer en su residencia de El Calafate al gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, con quien analizaron desde la mañana hasta entrada la tarde la conformación de la próxima gestión provincial.

Los dirigentes analizaron el grupo de colaboradores que asumirá junto a Peralta el 10 de diciembre y que le imprimirá un nuevo perfil al Ejecutivo provincial por los próximos cuatro años.

Peralta llegó sobre las 10:30 en el auto del intendente electo de El Calafate, Javier Belloni, y se retiró antes de las 17, luego de compartir con el matrimonio Kirchner un almuerzo de empanadas caseras, cocinadas en el horno de barro de la residencia.

Belloni, quien había sido recibido este viernes por los Kirchner, no se quedó a la reunión.

Luego de pasar la jornada analizando la actualidad y el futuro de la política provincial, Peralta se retiró sobre las 17, hora en que comenzó el partido de fútbol que ayer Boca le ganó a Racing.

Kirchner y el gobernador santacruceño acordaron no mirar el partido juntos: el Presidente es hincha de Racing y Peralta un fanático de Boca.

El mandatario provincial, que el domingo último logró su reelección, se retiró de la residencia por una puerta lateral, esquivando a la guardia periodística que esperaba sin éxito lograr una imagen de la presidenta electa, Cristina Fernández.

Sin embargo, Peralta no regresó a la capital provincial y permaneció en El Calafate junto a su familia, en la residencia de la Gobernación, a escasas cuatro cuadras del caserón que aloja a los Kirchner.

El matrimonio presidencial, por su parte, volvió al descanso "tranquilo y distendido", según revelaron quienes tuvieron acceso a la residencia, vistiendo ropa informal y aprovechando las jornadas de relax que terminarán el lunes próximo.

De todas formas, estaba previsto que el jefe de Estado y la presidenta electa reciban también al secretario de Legal y Técnica de la Nación, Carlos Zannini, con quien avanzarían en el análisis del futuro Gabinete de Cristina y del plan de transición de Gobierno.

Ya el viernes, el matrimonio presidencial había dedicado tiempo a la política local de Santa Cruz cuando recibieron en su casa patagónica al intendente Belloni.

Desde que Kirchner y Cristina se recluyeron en su casa de descanso, el miércoles pasado, fue Belloni la primera visita que recibieron, la cual se extendió por cerca de una hora.

Durante la reunión se analizaron en detalle los resultados de las elecciones en El Calafate, donde el kirchnerista Belloni se impuso sobre el candidato oficialista Julián Osorio, apadrinado del intendente Néstor Méndez, confió el propio Belloni en diálogo con periodistas.

Además, durante la reunión hubo un pedido del intendente electo para que el gobierno nacional "ayude con la instalación de servicios" en los más de 800 terrenos cedidos en la ciudad durante la campaña electoral, así como impulse nuevos planes de viviendas para los próximos años.

En este sentido, Belloni abandonó la residencia presidencial con el compromiso de Kirchner y Cristina de colaborar en su próximo Gobierno. De hecho, el jefe comunal ya agendó un encuentro con el secretario de Obras Públicas de la Nación, José López, para el próximo miércoles en Buenos Aires.