Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Toda la semana |HERRAMIENTAS PARA DESPEJARSE

La mente no para: qué hacer con los pensamientos negativos

Una idea recurrente, celos y hasta un problema sin resolver pueden convertirse en el enemigo íntimo que nos pone de mal humor y nos quita calidad de vida. Cómo evitarlo

La mente no para: qué hacer con los pensamientos negativos

Hay varias herramientas para combatir los pensamientos negativos

29 de Noviembre de 2020 | 09:17
Edición impresa

Todos alguna vez, en medio de cualquier actividad que no requiera demasiada concentración, nos hemos encontrado reflexionando temáticas que nos son incómodas o dolorosas. Muchas veces hasta hay pensamientos que nos ponen de mal humor. Pueden ser celos, pensamientos catastróficos, o cosas que simplemente no deseamos que ocupen lugar en la cabeza. Son imágenes y análisis que por más que uno se esfuerce siguen siendo un eco dentro de la mente y a veces hacen que disminuya la calidad de vida o menoscaba las relaciones con los demás.

Los expertos indican que no es fácil lidiar con esta vocecita de la mente, pero que existe la manera de sobrellevarlos y superarlos.

“En primer lugar, hay dos cosas que es conveniente tener en cuenta, que posiblemente sean de mucha ayuda. - adelanta Flavio Calvo, licenciado en psicología, docente, tallerista y autor- Una herramienta, es que esos pensamientos nos pertenecen, y como son nuestros tenemos el poder de trabajar sobre ellos. Muchas veces se dicen frases como `me viene tal pensamiento´ como si fuera algo externo, pero el pensamiento es creado por uno mismo y se pude hacer cargo de él”, explica el especialista y completa: “lo segundo para destacar es que no beneficia esforzarse por luchar contra ellos. El hecho de querer luchar contra ellos hace que siempre estén presentes, siendo contraproducente, y se logra así que se terminen acentuando. Cada vez que el esfuerzo está puesto en luchar contra un pensamiento, se lo está alimentando. Es como querer sostener una pelota bajo el agua, cuando más fuerza se hace hacia abajo, con más potencia va a salir a la superficie”.

“Es bueno poder reconocer qué tipo de pensamiento es el que está dando inconvenientes”

 

Entonces, ¿cómo dejar de lado ese tipo de pensamientos? parece que fluir, esa palabra tan escuchada en los últimos años no es sólo una suma de letras de moda, sino que ayuda a mejorar la calidad de visa sustancialmente.

“Luchar por no pensarlos va a hacer que estén cada vez más presentes. La cabeza los va a mostrar una y otra vez hasta que se haya asegurado de que se les prestó atención, entonces conviene prestarles atención, pensarlos, hasta escribirlos, para que la mente vea que están presentes y deje de mostrarlos una y otra vez”, dice Calvo.

PENSAR EN COSAS QUE PRODUZCAN FELICIDAD

Muchas veces hay pensamientos que dejan de estar presente cuando nos enfocamos en pensamientos positivos. Muchos de estos pensamientos negativos, además, están presentes por un vacío existencial. Cuando se puede pensar en acciones positivas estos retroceden.

“Es saludable pensar en que nos hace feliz, será útil tener un lugar dónde hacer una lista diaria de cosas positivas que hayan sucedido, en ocasiones, hay aspectos valiosos de nuestra vida pasan inadvertidos. Hacer esto ayudará a tenerlos en cuenta y valorarlos”, indica el especialista.

HACER EJERCICIO FÍSICO

Pareciera que no tiene nada que ver, pero está íntimamente relacionado con la manera de pensar de cada uno. El cuerpo y la mente no son compartimentos estancos sin relación. Cuando se hace ejercicio en forma periódica, la mente se despeja, porque el organismo libera endorfinas, las que mejoran el estado de ánimo.

ENCONTRAR LA DISTORSIÓN

Muchas veces la mente distorsiona la información tanto externa como interna que recibe. Es bueno poder reconocer qué tipo de pensamiento es el que está causando inconvenientes. Hay diferentes distorsiones cognitivas, estas son:

Los pensamientos nos pertenecen y por eso tenemos el poder de trabajar sobre ellos

 

• Totalización: pensar en términos de todo, todos, nada, nadie, siempre, nunca.

• Generación: hacer una regla general de una sola o de pocas experiencias.

• Inferencia arbitraria: relacionar dos cosas que en realidad no la tienen, llegando a una conclusión sin pruebas.

• Lectura de pensamiento: creer estar convencido de lo que otros piensan de vos.

• Magnificación o minimización: darle una magnitud equivocada a un problema o situación.

• Atribución interna o externa: hacerte a vos mismo o a otros completamente responsable de una situación.

Identificar para que nos sirvió en otro momento

Calvo explica también que “hay pensamientos que son aprendidos, y se conservan porque en otro momento de la vida sirvieron para algo. Por ejemplo, desconfiar de las personas, tal vez en otro tiempo te sirvió, para evitar que te fallen”.

Más allá de estas sugerencias, la ansiedad es algo que en la vida se está tornando difícil de controlar, es recomendable hacer un proceso de terapia que ayude a encontrar herramientas para poder trabajarlo más profundamente.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

Multimedia

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2250

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3450

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2250.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla