Monseñor Gustavo Carrara tras la misa por el Papa Francisco: "Es profundo el dolor, pero más grande el agradecimiento"

El Monseñor de La Plata, Gustavo Carrara, brindó la santa misa por el eterno descanso del Papa Francisco, quien murió este lunes a los 88 años, tras sufrir un derrame cerebral. Tras el homenaje que se llevó a cabo ante más de mil fieles en la Catedral, destacó el acercamiento del Evangelio por parte del Papa a la gente mediante un lenguaje de ternura y firmeza, así como el legado de una "iglesia en salida" centrada en la cercanía y el apoyo.

El Monseñor reflexionó sobre el impacto de Francisco, describiéndolo como un líder que mostró una Iglesia cercana a las personas y promovió valores de fraternidad y atención a los vulnerables. Luego, compartió su experiencia personal en su nuevo rol y su recuerdo de la cercanía del Papa Francisco como persona.

Al ser consultado por Diario EL DIA, Gustavo Carrara expresó: "Todavía estoy conmocionado por la noticia, pero muy feliz por la cantidad de gente, del pueblo fiel de Dios, que vino a rezar y a expresar su cariño con la oración al Papa Francisco. Es un día de mucha emoción".

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Además, agregó: "Hoy le escuché a un sacerdote amigo que me dijo algo que me parece que resume mi experiencia. Es profundo el dolor, pero es mucho más grande el agradecimiento que yo tengo para con el Papa y que creo que hoy también se vivió acá en esta misa".

Acerca del mensaje que dejó el Papa Francisco, el arzobispo señaló: "Fue quien puso el evangelio de Jesús muy cerca de la gente, con un lenguaje que todo entendemos y que es el lenguaje de la ternura, de la misericordia y también de la firmeza cuando hay que defender a los más frágiles. De alguna manera estamos recién empezando a dimensionar todo lo que es su legado. La verdad, confieso que estoy todavía muy conmocionado, muy perplejo como para decir mucho".

A modo de balance, refirió: "Es una iglesia en salida la que propone el Papa Francisco, una Iglesia en salida que a veces es hospital de campaña para estar cerca del dolor de la gente. Una Iglesia que se involucra, que busca acompañar, que busca hacer un camino con los pueblos que nos llama a recuperar el sentido humanista de la vida".

"Francisco nos mostró el rostro de una Iglesia que puede estar cerca de lo que le pasa al hombre y a la mujer de a pie. Nos enseñó a escuchar, el grito de la tierra y el grito de los pobres. Nos muestra un camino de la fraternidad y de la amistad social. En vez de levantar murallas hay que tender puentes. El mensaje es realmente muy profundo", agregó.

De esa manera, concretó: "Él está presente y también lo que estamos celebrando en la Pascua, la resurrección y la vida de Jesús. Una persona que fallece no es del pasado de nuestra vida, sino que la tenemos viva y presente en nuestro corazón y con la esperanza de abrazarnos nuevamente en el cielo. Esa es mi esperanza, de darle un abrazo en el cielo también".

Por último, Carrara recordó: "Era un sacerdote, un obispo y un papa muy cercano. Sabía de barrio, que sabía de tomar un colectivo, de subtes o de hacer las compras. Un sacerdote muy cercano a lo que viven las personas comunes. Por eso yo creo que que sintonizó tanto".