A 50 años de la polémica expulsión de Rattin ante Inglaterra en el Mundial de 1966

El 23 de julio de 1966, Antonio Rattin, capitán del seleccionado argentino, sufrió una polémica expulsión en el partido por cuartos de final que ganó 1-0 Inglaterra, que luego obtendría el título, derrota que supuso una nueva frustración para el equipo nacional, ya que quedó eliminado del Mundial organizado por el anfitrión. La expulsión en el viejo estadio de Wembley, a los 33 minutos del primer tiempo, se produjo cuando el juez alemán Rudolf Kreitlen le mostró la salida al mediocampista y símbolo de Boca Juniors tras sus reiteradas protestas por un arbitraje que consideraba parcial.

Los medios argentinos hablaron de "despojo" y se calificó al equipo como "campeón moral", luego de que los hinchas pudiesen ver las escenas de esa eliminación en el Mundial, un par de días después de ocurrida, ya que por en esos tiempos no había transmisión por satélite y las circunstancias se siguieron de manera diferida por Canal 2. El seleccionado argentino llegó a ese torneo en medio de una de las tantas crisis organizativas de nuestro fútbol, ya que tres meses antes de viajar el técnico Osvaldo Zubeldía renunció porque la AFA no contempló a Antonio Faldutti como su ayudante. Se hizo cargo del equipo Juan Carlos "Toto" Lorenzo, que ya había sido el DT en la decepcionante actuación en el Mundial de Chile 1962.

En cuanto al torneo, que significaría el único título mundial conseguido por Inglaterra, tuvo como curioso condimento previo, el robo en Londres, unos meses del inicio de la disputa, de la Copa "Jules Rimet", una figura de oro macizo que luego fue encontrada abandona en un jardín por un perro que había salido a pasear junto a su dueño. Rattin, el protagonista de aquella jornada, recordó: "Veníamos de conseguir dos años antes y en Río de Janeiro la Copa de las Naciones ante Brasil, Inglaterra y Portugal. A todos los que les dimos un baile bárbaro pero en el Mundial todo fue distinto".

Rattín, actual vicepresidente de la Mutual de ex jugadores de Boca, señaló: "Hicimos antes de llegar a Londres una gira previa en la que jugamos varios partidos hasta con un equipo que integraban soldados, bomberos y policías y con el que perdimos. En esos amistosos, el 'Toto' Lorenzo, que había jugado en Italia y se había llevado varios ayudantes italianos, lo puso de 5 a (José Omar) Pastoriza y en otro amistoso a (Juan Carlos) Sarnari. A mi no me tenía en cuenta". Al llegar el primer partido ante España, en Birmingham, la noche previa al cotejo, Lorenzo llamó a Rattin a su habitación en el hotel y le dijo que iba a ser titular y capitán. "Para mí fue una sorpresa", recordó el jugador.

Lorenzo tenía un esquema conservador, amante del "catenaccio" italiano, y en las prácticas atronaba con sus gritos hasta que el presidente de la delegación argentina, el dirigente de Banfield Valentín Suárez, que luego sería el interventor de la AFA, "le paró el carro", según Rattin. Argentina, en su debut por el Grupo B, ganó 2-1 a España, luego igualó 0-0 con Alemania, que contó con un joven Franz Beckenbauer, y finalmente venció 2-0 a Suiza. La diferencia de gol hizo que el equipo argentino clasificara segundo a la siguiente ronda y quedara en la próxima fase aparejada con Inglaterra, el país anfitrión. En cuartos de final, Argentina fue arbitrado por Kreitlen, un sastre alemán, en tanto que el británico James Finney fue el referí del partido en que Alemania Occidental le ganó 4-0 a Uruguay.

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Ese cruce de árbitros en partidos de equipos que luego jugarían la final del Mundial arrojó históricamente un manto de sospechas sobre las designaciones, ya que días antes del inicio del torneo, los representantes de Argentina, Uruguay, España y de Unión Soviética fueron citados en un hotel londinense para el sorteo de los árbitros, que cuando llegaron ya se había realizado. En el partido ante Inglaterra, Argentina, fiel a la estrategia del "Toto" Lorenzo, formado en la escuela italiana, salió con un esquema defensivo. Ermindo Onega, el creador del equipo, recibió la implacable marca de Norbert "Nobbie" Steiles, un jugador del Manchester United que tenía la particularidad de jugar con lentes de contacto y que años después ante Estudiantes por Libertadores, buscó infructuosamente en La Bombonera uno que se le había caído.

Sólo se registró una llegada del equipo nacional a la última línea inglesa con una solitaria incursión de Oscar Más. Rattin repitió sus protestas a Kreitlen en cada intervención fuerte de los locales. En el minuto 33 del primer tiempo, una entrada de Roberto Perfumo motivó su reclamo y el árbitro lo advirtió. Rattin se acercó a Kreitlen, volvió a cuestionarlo y fue expulsado. "Me echó por pedir un intérprete y mostrarle mi cinta de capitán. Yo no hablaba una sola palabra de alemán", recordó el "Rata", que se resistió a salir del campo y, tras diez minutos de demora, fue escoltado por la policía y acompañado por Ken Aston, cabeza del Comité Arbitral. El camino hacia los vestuarios de Rattin fue lento y durante su trayectoria, el jugador argentino insultó a los hinchas ingleses y les mostró su camiseta con el número 10.

Al pasar por un vértice de la cancha estrujó el banderín de un córner (una bandera británica) y el público terminó de enloquecer, arrojándole latas de cerveza que se vendían en el estadio. Rattin rememoró que luego se sentó por unos segundo en la corta alfombra roja que conducía al palco de la reina Isabel "que no estaba, ya que solo fue a la cancha en el debut de Inglaterra y en la final". La amonestación de Perfumo como la expulsión del capitán argentino fueron anotadas por Kreitlen en su libreta, ya que no existían en esa época las tarjetas amarillas y rojas, lo que motivó la implementación por parte de la FIFA de ese recurso para el próximo Mundial de 1970. Por otra parte, Stanley Rous, el inglés presidente de FIFA, aprovechó los hechos de aquel partido para multar al seleccionado albiceleste con la máxima sanción monetaria permitida: 1000 francos suizos. Y Rattin fue suspendido por dos partidos internacionales.

"Hace unos ocho años me llamaron de Alemania para juntarme en una nota periodística con Kreitlen y les dije que no tenía ningún interés", aclaró el argentino sobre el encuentro frustrado con el árbitro fallecido 2013. En el segundo tiempo de aquel cotejo, los ingleses abrumaron con sus centros a la defensa argentina hasta que Geoff Hurst pudo vencer la valla defendida por Antonio Roma con certero cabezazo. Al finalizar el encuentro, varios jugadores argentinos, titulares y suplentes, se abalanzaron con sus protestas sobre el árbitro que tuvo que retirarse con una fuerte custodia policial.

Cuando el seleccionado partió hacia Inglaterra, estaba el gobierno democrático de Arturo Illia que el 29 de junio de 1966 fue derrocado por el golpe del general Juan Carlos Onganía, autotitulado "Revolución Argentina". A su regreso al país, el equipo albiceleste fue recibido por ese militar en la Casa de Gobierno, quien felicitó a sus integrantes. "La brillante campaña realizada en base a coraje y espíritu de lucha los hace acreedores al jubiloso recibimiento del pueblo y el gobierno de la Patria", afirmó el dictador.

FICHA TÉCNICA DEL PARTIDO

Inglaterra: Gordon Banks; George Cohen, Ray Wilson, Jack Charlton y Bobby Moore (C); Stiles, Alan Ball y Martin Peters; Bobby Charlton, Hurst y Roger Hunt. DT:Alf Ramsey.

Argentina: Antonio Roma; Roberto Ferreiro, Roberto Perfumo, Rafael Albrecht y Silvio Marzolini; Jorge Solari, Rattín y Alberto González; Ermindo Onega; Luis Artime y Oscar Mas. DT: Juan Carlos Lorenzo.

Gol en el segundo tiempo: 34m. Hurst (I).

Árbitro: Rudolf Kreitlen.

Estadio: Wembley.