Los “Pajaritos” del Indio Solari vuelan rápido de las disquerías

El debut en las bateas de “Pajaritos bravos muchachitos”, lo nuevo del Indio Solari y sus Fundamentalistas del Aire Acondicionado, provocó en nuestra ciudad una verdadera fiebre que recordó a la vivida durante la venta de tickets para su reciente show mendocino.

Centenares de fanáticos platenses del ex Redondo virtualmente acamparon desde las primeras horas del miércoles frente a disquerías del centro para hacerse con alguna de las copias inaugurales distribuidas por el sello editor del álbum.

La tendencia se consolidó ayer, y se espera que se repita por algunos días con la colección de doce canciones que incluye títulos como “A los pájaros que cantan sobre las selvas de Internet”, “Beemedobleve”, “A la luz de la luna”, “Las supersticiones traen mala suerte”, “Amok! Amok!”, “Chau mohicano”, “Área monster”, “Cada pequeña muerte”, “Babas del diablo”, “Había una vez”, “Un par de fantasmas” y “La pajarita pechiblanca”.

En este contexto, el maestro de ceremonias del “pogo más grande del mundo” rompió el silencio, y aseveró que “un artista lo que hace es recibir emociones, y las transmite: las mezcla, las bate, las agita y las vuelve a poner”.

Acerca del proceso compositivo de su flamante obra, Carlos “Indio” Solari admitió que la cuestión es ahora “más compleja” que cuando estaba al frente de los Redondos, donde todo era “bastante más simple, porque era una banda de rock”, mientras ahora se interesa por “salirse de los géneros, incluir instrumentos extraños, texturas...”

“En el momento de la composición, independientemente de lo que quieras decir, las emociones que te abarcan a veces no son festivas ni alegres, sino más bien todo lo contrario”, agregó.

Además, reveló que está en una etapa de su vida en la que no tiene “mucho más que aportar que no sean canciones”.

La inclusión de un tema firmado por los ex Redonditos de Ricota Semilla Bucciarelli, Sergio Dawi y Walter Sidotti, se dio debido a que “se me ocurrió que ya había llegado el momento”, subrayó Solari: “la verdad, por mí los hubiera invitado en el primer disco”.

“No quería que se considerara una reunión de los Redondos, por eso les pedí que ellos compusieran el tema” aclaró.

Acerca de su repertorio en vivo, abundó en que “lo que yo toco son todas mis canciones, los temas no son de los Redonditos, son míos. No hay una sola canción que no sea mía. Yo toco todas mis canciones. No puedo tocar todo del último material. Pero con los Redondos hicimos como diez discos y míos tenía tres hasta ahora, entonces hay muchos temas de los Redondos que disfruto hacer con esta banda porque suena bárbaro. Pero no hay ninguna puta canción que no sea mía, entonces tengo derecho a usarlas en el momento que quiero”.

Siempre sobre sus descomunales shows, reconoció que tiene que tomar “dos Diclofenac” y que si no fuera así “tocaría por lo menos cinco o seis veces por año. Además, al público se le dice que el show está ‘sold out’ y va igual; son chichoneros, se ponen a bailar enfrente, y es peligroso porque estamos hablando de miles de personas. Es una batalla grossa. El de Mendoza fue el recital más significativo por la cantidad de gente, pero el más desprolijo; caía aguanieve, ahí arriba fue bravo”.