Los gestos obscenos del arquero de Barracas que "nadie" vio

La actitud asumida por el arquero de Barracas Central en el partido de ayer ante Villa Dálmine en Campana provocó distintas expresiones críticas hacia las autoridades arbitrales del partido que no adoptaron ningún castigo para el futbolista. Barracas se apresta a disputar con Tigre la final por el Ascenso a Primera División del Grupo A en un torneo muy polémico y cargado de enojos.

En cuando al gesto del arquero, Barracas Central acababa de anotar el tercer gol ante Villa Dálmine en Campana y en medio del festejo el golero Alejandro Gagliardo jugaba su partido.

El experimentado guardameta (38 años) decidió tomarse repetidamente la entrepierna ante los hinchas del Violeta, en un gesto provocador que tomaron las cámaras de la transmisión de TV.

Enseguida, advertidos de la actitud, los jugadores locales, con Francisco Nouet a la cabeza, fueron a increparlo, y se generó una pequeña gresca que antecedió al final del encuentro, por la fecha 34 de la Primera Nacional.

Lo curioso –dicen las crónicas periodísticas--, fue que la terna arbitral encabezada por Pablo Dóvalo (ni el juez principal, ni ninguno de sus asistentes) lo sancionaron. Estaba amonestado, pero los gestos obscenos deberían haber sido penados con la tarjeta roja.