Actividad física: los secretos de una rutina de gimnasia efectiva en invierno

Cuando llegan las temperaturas más bajas del año, antes del invierno o en pleno curso de la estación, el hábito de hacer actividad física puede verse afectado. Entre tantas cosas, por las precauciones para cuidar la salud y la necesidad de adecuar la indumentaria.

Para moverse y no caer en el sedentarismo propio de la época, es primordial tener en cuenta que existen ejercitaciones para hacer en casa (según el espacio que se disponga), en los gimnasios más y mejor equipados de la Ciudad o, por qué no, al aire libre en las plazas o parques platenses. Siempre bajo la supervisión de los profesionales del área, no se debe abandonar la movilidad tanto con actividades aeróbicas o anaeróbicas.

La Plata es, entre tantas cosas, una capital universitaria y es importante aprovechar el conocimiento que existe en materia de preparación física. Los profesores y licenciados de la Universidad Nacional local están sumamente preparados para acompañar esta tarea.

BENEFICIOS

Uno de los puntos más destacados de hacer ejercicio en invierno es el aumento de la quema de calorías. A medida que las temperaturas bajan, el organismo necesita realizar un mayor esfuerzo para mantener el calor corporal. Este proceso conlleva un aumento en la actividad metabólica, lo que se traduce en un mayor gasto de energía y, en última instancia, en el cumplimiento del beneficio. Además, el frío promueve la contracción de los músculos, lo que implica un mayor trabajo muscular al ejercitarse, generando así una mayor quema calórica en comparación con el ejercicio en verano.

Un beneficio destacado de hacer ejercicio en invierno es el aumento de la quema de calorías

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Por otro lado, la capacidad pulmonar se ve incrementada, facilitando una mejor respiración y oxigenación de los tejidos. El movimiento regular en esta época también contribuye al desarrollo y fortalecimiento de los músculos, lo que se traduce en una mayor fuerza y resistencia física.

La actividad física estimula la producción de células responsables de la defensa del organismo, mejorando de esta manera nuestras defensas naturales contra enfermedades. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la exposición prolongada a temperaturas extremas o los cambios bruscos de temperatura pueden debilitar el sistema inmunológico, por lo que se deben tomar las precauciones necesarias para evitar tales situaciones. Siempre es importante consultar con un profesional de la salud ante la primera duda.

Hacer actividad al aire libre ayuda a regular el reloj biológico y la calidad del sueño

El ejercicio físico libera endorfinas, neurotransmisores que generan una sensación de bienestar y euforia. En tanto, al realizar actividad física al aire libre, aprovechamos la luz natural, lo que ayuda a regular nuestro reloj biológico y mejorar la calidad del sueño. La práctica regular de ejercicio en invierno puede ser una excelente herramienta para combatir la depresión estacional y mejorar el equilibrio emocional.

RECOMENDACIONES

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los adultos realicen al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física intensa por semana, o una combinación de ambas.

Realizarla de forma moderada, aumenta ligeramente la frecuencia cardíaca y la respiración y permite mantener una conversación. Ya sea caminar rápido, trabajar en el jardín, hacer un pozo con una pala o jugar activamente con niños, todo suma.

Es importante vestirse adecuadamente y en capas para protegerse del frío / Manfred Richter - Pixabay

La actividad física intensa es aquella que eleva mucho la frecuencia cardíaca y la respiración, y dificulta hablar más de unas pocas palabras, como correr, nadar, saltar la cuerda, hacer aeróbicos o practicar deportes competitivos.

En primer lugar, es importante adaptar el tipo y la intensidad del ejercicio a nuestras condiciones físicas, preferencias y objetivos. No es lo mismo hacer ejercicio para mejorar nuestra salud cardiovascular, que para fortalecer nuestros músculos o para relajar nuestra mente. Tampoco lo es el hacer ejercicio si se es principiante, que si se tiene experiencia o si se sufre alguna enfermedad crónica.

La actividad física en invierno tiene una influencia positiva en el estado de ánimo

En general, se recomienda realizar al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana, o 75 minutos de actividad física vigorosa, durante al menos tres días. También se aconseja incluir ejercicios de fuerza para todos los grupos musculares al menos dos veces por semana, y ejercicios de flexibilidad y equilibrio para prevenir lesiones y mejorar la movilidad.

En segundo lugar, es fundamental elegir un lugar adecuado para hacer ejercicio, ya sea en casa o al aire libre. Si se opta por hacer ejercicio en casa, se debe contar con un espacio suficiente, ventilado y con una superficie firme y antideslizante. Otra opción es utilizar algunos objetos como colchonetas, pesas, bandas elásticas o pelotas para aumentar la variedad y la dificultad de los ejercicios.

Los ejercicios de coordinación son fundamentales. También es necesario acompañar de temas musicales / Web

En el caso del ejercicio al aire libre, hay que tener en cuenta las condiciones climáticas y vestirnos con ropa adecuada. Lo ideal es usar varias capas de ropa transpirable que nos permitan regular la temperatura corporal según el nivel de esfuerzo. No es menor el llevar consigo gafas, gorra y protector, ya que el sol afecta en la misma medida -aunque no haya altas temperaturas-, y del viento o la lluvia con un impermeable o un cortavientos.

La hidratación es fundamental antes, durante y después de los ejercicios, ya que el invierno y las temperaturas bajas reducen la sensación de sed.

La actividad física es fundamental para mantener una buena salud y prevenir enfermedades

En tercer lugar, es conveniente escoger una actividad física que guste y motive a seguir haciéndola. Hay muchas opciones para hacer ejercicio en invierno, desde caminar, correr o andar en bicicleta. Se puede aprovechar las actividades cotidianas como subir escaleras, limpiar la casa o jugar con los chicos de la casa para aumentar nuestro nivel de actividad física.

Como alternativa, las actividades grupales con amigos puede hacer de la actividad un momento de diversión y estimulación a la misma vez. En tiempos donde la tecnología avanza, la virtualidad es un nuevo camino que se abre, dando la alternativa de clases online.