
Estudiantes jugó un mal primer tiempo y se fue al descanso perdiendo con River 2 a 0
Estudiantes jugó un mal primer tiempo y se fue al descanso perdiendo con River 2 a 0
El triunfo peronista, el nuevo reto que le plantean a Kicillof y la desatada interna libertaria
Panorama económico: acciones y bonos caen, y los dólares llegan al techo
Thiago Medina pelea por su vida y sigue en terapia intensiva: qué dice el último parte médico
Sorpresivo aumento del precio de las naftas este sábado: en La Plata la premium ya supera los $1.600
Desde este domingo, encontrá EL DIA en nuevos puntos de la Ciudad
Miles de drones formaron su rostro: el emotivo homenaje al papa Francisco en el Vaticano
Colegio de Médicos bonaerense repudió los vetos presidenciales contra el Hospital Garrahan
La Justicia de La Plata citó a Santiago Maratea, denunciado penalmente: cuándo se deberá presentar
Hizo "wheelie" y atropelló a dos nenas en la zona oeste de La Plata
Guillermo Francos reconoció que el oficialismo se equivocó al “nacionalizar” la elección bonaerense
Ganaron La Plata, Los Tilos y San Luis en el Top 12 del Rugby de la URBA
VIDEO | Un momento estremecedor: la conmovedora despedida de la viuda a Kirk, el activista asesinado
Reclamo de vecinos de Gonnet por un asentamiento y el temor a "más usurpaciones"
Celular 5G, TV Led y un metegol: EL DIA premia a sus suscriptores con sorteos imperdibles
"Estoy disfrutando": rompió el silencio Evangelina Ánderson en medio de explosivos rumores
¿Se viene el "fernetazo"? Advierten que la libertad no avanza en Córdoba
Zeballos y Molteni ganaron en dobles y Argentina clasificó a las finales de la Copa Davis
Una agenda con mucha música, cine, teatro y aire libre este sábado en La Plata
El cuento más cruel en La Plata: despojaron a una jubilada de sus ahorros
Noche de pasión y test de embarazo: el increíble giro en la vida de Wanda
Atención: el Tren Roca no llega a La Plata este sábado y domingo
Golpeó a su pareja, la tiró en una zanja y dejó heridos a dos policías en La Plata
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Singularidades del autor de “Allá lejos y hace tiempo”. Es venerado en Japón, donde sus obras son leídas en las escuelas. La vigencia de un hombre nacido en Florencio Varela y que llegó a la cima de la ciencia
Hudson fue lo que Unamuno llamaba “especie única”. Nació en Florencio Varela en la chacra donde hoy se levanta el museo que lo recuerda. Desde allí llegó a la elite de la ciencia
MARCELO ORTALE
Por MARCELO ORTALE
“W.H. Hudson nació en la Argentina en 1841 y en 1873 viajó a Inglaterra, donde permaneció el resto de su vida. Fue un escritor notable, muy apreciado en los ambientes literarios y un naturalista de campaña dedicado a lo que hoy conocemos por etología, gran observador de aves, sobre las que hizo ensayos admirables; ninguno como él describió el canto de los pájaros y los lugares que recorrió, tanto en su juventud argentina como en su madurez británica”.
Ese texto es de la escritora y académica Alicia Jurado, que así inició su prólogo del libro “Ralph Herne” de Guillermo Enrique Hudson que, hasta hace pocos años, se encontraba sólo publicado en inglés por la revista Youth en forma de folletín, desde el 4 de enero al 14 de marzo de 1888. No había desde entonces una versión española de este casi desconocido primer libro del autor de “Allá lejos y hace tiempo”, hasta que la Editorial Letamendia lo publicó en Buenos Aires en 2006 con la traducción hecha por Jurado.
En estas columnas se habló de “Allá lejos y hace tiempo”, de “Días de Ocio en la Patagonia”, de “Un naturalista en el Plata” o “La tierra purpúrea”, entre otras cumbres de Hudson que forman parte de las lecturas en escuelas de muchos países –entre otros, del Japón, en donde es un escritor venerado- pero la vida y la obra, todo lo de Hudson es sorprendente e inclasificable.
Fue lo que lo que Unamuno llamaba “especie única”. Hijo de estadounidenses, nacido al sur de Florencio Varela, se crió en la chacra “Los veinticinco ombúes”, donde hoy se encuentra el museo que lo recuerda. Y allí aprendió del campo argentino. Llegó a la elite de la ciencia en el mundo y fue un autodidacta. De él dijo Ezequiel Martínez Estrada: “nuestras cosas no han tenido poeta, pintor ni intérprete semejante a Hudson, ni lo tendrán nunca”. No copió el estilo nadie y ninguno pudo copiarlo.
El cuento “Ralph Herne” consiste también en otra suerte de exclusividad muy hudsoniana. Libro poco divulgado, trata sobre la fiebre amarilla que asoló a Buenos Aires en 1871. “Si bien Hudson no la sufrió, porque se encontraba entonces en la Patagonia, no le deben haber faltado quienes le contaron minuciosamente sus horrores”, añade la prologuista.
El cuento trata de un joven médico inglés que se graduó en Londres, pero no conseguía revalidar su título en Buenos Aires, adonde había venido. “Al estallar la epidemia trabajó incansablemente con los enfermos, le otorgaron el título y terminó casándose con la muchacha de quien se enamoró, aunque antes de eso ambos cayeron enfermos y se recuperaron”, anticipa Jurado.
LE PUEDE INTERESAR
Cuestión de honor: a 100 años de la ley de duelo en Uruguay
El estilo natural, casi perfecto –aún juvenil- de Hudson se vislumbra en este párrafo en el que describe el panorama que ofrecía Buenos Aires acosada por la epidemia: “….en las calles se observaba una cosa extraña: había empezado a crecer el pasto y donde se miraba se veían briznas verdes y tiernas en las juntas de los pequeños bloques cuadrados de granito; mientras que cerca de la vereda no era sólo pasto, sino una hierba trepadora con hojas redondas y una flor blanca diminuta parecida a una margarita”. La epidemia, según el relato de Hudson, convertía a la ciudad caliginosa del verano, en un jardín tropical, con habitantes afiebrados y lánguidos vagando sin esperanzas por una Buenos Aires desolada.
El libro traducido por Jurado está ilustrado en la tapa por el famoso cuadro del pintor uruguayo, Manuel Blanes, sobre la fiebre amarilla en Buenos Aires. Dice el historiador Daniel Balmaceda que esa pintura “se refiere específicamente a un hecho que tuvo lugar en la madrugada del 17 de marzo de 1871 cuando la epidemia ya empezaba a preocupar mucho y gran parte de la población de Buenos Aires se había alejado de la ciudad. Esa noche, el sereno Manuel Domínguez caminaba por la calle Balcarce. Era la una de la mañana. Advirtió que la puerta de la casa con el número 384 (de la numeración vieja) se encontraba abierta. Por lo anormal de la situación, golpeó para ser atendido. Repitió el llamado y decidió entrar. Allí encontró a una mujer tendida en el piso y encima de ella una niña que estaba aferrada a su pecho tratando de ser amamantada. Con la beba en brazos, buscó a su superior de guardia en la comisaría, José María Sáenz Peña, y le entregó la criatura. Ya en la mañana unos policías concurrieron a la casa de la calle Balcarce donde yacía el cuerpo de la mujer”.
La mujer muerta –añade Balmaceda- se llamaba Ana Bristiani, era italiana y su marido enfermo estaba en la Boca y “por lo tanto, ése no era su hogar. Pero en esa Buenos Aires abandonada, una casa vacía era tierra de nadie”. El cuadro muestra a los médicos Roque Pérez y Manuel Argerich observando la trágica escena.
Se podría decir que Hudson tuvo cuatro países en su corazón. En la Argentina y en Inglaterra (a esta última la consideró su verdadera patria) vivió y se sintió uno más. Sobre el Uruguay escribió un libro de culto “La tierra purpúrea”, escrito en 1885 cuando ya vivía en Inglaterra. Se trata de un maravilloso retrato de la Banda Oriental, en sus tiempos coloniales.
“La tierra purpúrea” es uno “de los muy pocos libros felices que hay en la tierra” dijo Borges. En ella se narra el viaje de un inglés por la convulsa Banda Oriental (el actual Uruguay) y su regreso a Buenos Aires. La mayoría de los críticos considera que fue la obra principal de Hudson y la valoran esencialmente como una suerte de adoración del autor a un reino perdido.
El crítico español José María Guelbenzu escribió en El País: “Para muchos lectores, entre los que me cuento, “La tierra purpúrea” es un libro legendario… Un libro soberbio, una oportunidad como pocas de alcanzar con la imaginación y, permítaseme decirlo, con las manos y los sentimientos a la vez, un mundo, un orbe de cultura, una lección de vida inolvidable y un verdadero canto por la tierra amada”.
Hudson parece renovarse. Su nombre y su obra le dan la razón a Joseph Conrad, cuando dijo “Hudson es una fuerza de la naturaleza”. Todo sobre lo que habla se ve rodeado de vida. Así describió a la Patagonia al recordarla desde Inglaterra: “He pasado noches en el desierto, y al despertar allí, en los amplios espacios abiertos y llanos, la primera claridad del cielo por oriente, el grito del tinamú y el perfume del campo, me han parecido siempre una especie de resurrección”.
Horacio de Dios escribió en La Nación el artículo titulado “Japoneses en la Argentina y una lección de vida”, en donde cuenta la veneración que los japoneses sintieron por Hudson a mediados del siglo pasado: “Esta historia tiene punto de partida en 1958, cuando el embajador japonés Masao Tsuda se indignó al saber que la casa de Los 25 Ombúes, descubierta por Fernando Pozzo en 1929, se había convertido en una tapera con intrusos y corría el riesgo de quedar destruida. Denunció el hecho en una carta de lectores. El entonces gobernador Oscar Alende lo llamó y comenzó a revertirse el proceso, que llegaría a feliz término con la gestión de Violeta Shinya (sobrina japonesa de Hudson)”.
Sus restos descansan, junto a los de su esposa, en el cementerio de Whorting
Sigue diciendo De Dios: “El diplomático era presidente de la Asociación Hudsoniana de Tokio. El dato es simbólico, porque nuestro gran autor es leído en las escuelas y respetado por todos desde el término de la Segunda Guerra Mundial. En aquel momento, Japón decidió profundizar el conocimiento del idioma inglés sin perder sus costumbres. Y Hudson era la respuesta, porque en sus 24 libros también amaba a la naturaleza”.
“El mismo Tsuda recomendó a la profesora Violeta para la nueva tarea. Era hija de Yoshio Shinya, el primer inmigrante japonés que llegó al país en la Fragata Sarmiento porque había sido un cicerón imprescindible en Tokio. Aquí se casó con Laura Delholm, sobrina de Hudson, y fueron padres de Violeta en 1910, que se convertiría luego en la primera universitaria nikkei, argentina de ascendencia japonesa. La sobrina nieta del escritor dirigió el parque hasta su muerte, a los 80 años, en 2003”.
Cabría señalar que Tsuda escribió el libro “Las huellas de Guillermo Enrique Hudson”, atraído por el naturalismo y el misticismo del escritor. A su vez, la colectividad japonesa en nuestro país se sintió también atraída por esa suerte de panteísmo tan oriental y cercano a la cultura japonesa de Hudson, que alguna vez escribió: “El cielo azul, el oscuro suelo debajo, los pastos, los árboles, la lluvia y las estrellas no son extrañas para mí, porque yo estoy en ellas y mi carne y el suelo son uno y el calor de mi sangre y el ardor del sol son uno y el viento y la tempestad y mis pasiones son uno”
Respetado como científico, admirado como escritor, Hudson, que había nacido el 4 de agosto de 1841, murió el 18 de este mismo mes, en 1922, hace casi un siglo. Sus restos y los de su esposa Emily Wingrave descansan en el cementerio de Worthing, al norte de Londres.
Hudson fue lo que Unamuno llamaba “especie única”. Nació en Florencio Varela en la chacra donde hoy se levanta el museo que lo recuerda. Desde allí llegó a la elite de la ciencia
ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES
HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS
Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales
¿Ya tiene suscripción? Ingresar
Full Promocional mensual
$670/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6280
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Acceso a la versión PDF
Beneficios Club El Día
Básico Promocional mensual
$515/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $4065
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Diario El Día de La Plata, fundado el 2 de Marzo de 1884.
© 2025 El Día SA - Todos los derechos reservados.
Registro DNDA Nº RL-2024-69526764-APN-DNDA#MJ Propietario El Día SAICYF. Edición Nro. 6986 Director: Raúl Kraiselburd. Diag. 80 Nro. 815 - La Plata - Pcia. de Bs. As.
Bienvenido
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
Bienvenido
Estimado lector, con sólo registrarse tendrá acceso a 80 artículos por mes en forma gratuita. Para más información haga clic aquí
DATOS PERSONALES
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
¿Querés recibir notificaciones de alertas?
Para comentar suscribite haciendo click aquí